De 8 a 12 años de prisión, además de una multa de 32 mil 571 a 75 mil 999 pesos, será el castigo a quienes cometan ataques en razón de género con ácido, sustancias corrosivas o químicas en el estado de Veracruz.
El Congreso local aprobó tipificar el delito de violencia ácida, para garantizar una vida libre de violencia para las veracruzanas. Lo mismo ocurrió en Hidalgo un día antes, cuando su Poder Legislativo con 21 votos a favor, aprobó la Ley Contra la Violencia Ácida.
En aquella entidad el castigo podría alcanzar hasta de 32 años de cárcel, si la víctima del delito es menor de edad, mujer o persona con discapacidad; si se afecta la función de un órgano vital, o más de la mitad del cuerpo.
A estos pequeños grandes avances en la búsqueda de protección para las mexicanas, se sumó la orden que un Tribunal Colegiado dio al Congreso de Nayarit, para eliminar el delito del aborto y con ello derogar los artículos que criminalizan el derecho a decidir, declarándolos inconstitucionales.
Pero mientras las mujeres ganamos derechos en unos estados, en otros se vulnera nuestra seguridad, sin leyes y con ellas, como en el estado de Morelos, donde tanto la Interrupción Legal del Embarazo como la tipificación de la violencia ácida, siguen estancados.
La entidad gobernada por Cuauhtémoc Blanco sólo permite el aborto en circunstancias específicas (malformaciones y peligro de muerte) y no por la voluntad de la mujer sin cuestionamientos.
Sobre la Ley Ácida, en Morelos el tema sigue congelado desde el año pasado, sin que se defina aún la fecha
para discutirlo.
Uno pensaría que es porque se atienden otros temas tan relevantes como la inseguridad que abraza a las mujeres en el estado, pero no, tampoco de eso se ocupan y para muestra, la estadística.
En 2022 el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública reportó 32 feminicidios en Morelos; en el 2023 la cuenta oficial llegó a 45 crímenes en razón de género. Organizaciones como la Comisión Independiente de los Derechos Humanos documentó 125 casos y según sus registros, son un total de 1,428 feminicidios en 23 años (hasta el fin de 2023).
En los dos primeros meses de 2024, en Morelos se habían registrado 17 feminicidios, lo que representa un aumento del 183 por ciento respecto al mismo periodo de 2023, cuando se reporta-
ron seis casos.
En días recientes, autoridades del Gobierno de México dieron a conocer el aumento de este delito en 12 entidades del país, listado en el que Morelos destaca como la más crítica, con la tasa de criminalidad más alta con 2.75 por cada 100 mil habitantes. En cifras oficiales, Morelos aumentó 25 por ciento la incidencia de feminicidios, pasando de 25 casos reportados en el primer semestre de 2023, a 30 víctimas en el mismo periodo del presente año.
Además, los casos de violencia familiar se incrementaron 14.5 por ciento entre 2019 y el 2023, pues pasaron de 5 mil 132 carpetas de investigación por este delito, en el primer año de la presente administración, a 5 mil 877 casos el año pasado.
Los delitos contra la libertad sexual aumentaron también en una proporción de 17% de 2018 a 2023; los casos de abuso sexual pasaron de 454 a 622 y la violación simple fue de 426 casos a 479.
La situación empeora cuando revisamos el índice de impunidad de Morelos, que es de 99.8 por ciento, precisamente en crímenes como el feminicidio. Peor aún cuando el Consejo Ciudadano de Seguridad Morelos identifica a este territorio como el noveno más violento del país, en tasa por 100 mil habitantes, particularmente en delitos de alto impacto y aquellos que se ejercen con violencia.
Morelos tiene ocho municipios bajo la Alerta de Violencia de Género que son Cuernavaca, Cuautla, Juitepec, Temixco, Emiliano Zapata, Puente de Ixtla, Xochitepec y Yautepec, pero el reciente informe elaborado por la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres, señala que la entidad no cumple su trabajo en esa materia, pues de las 15 medidas que deben cumplirse, el 53 por ciento no se ejecuta en su totalidad, el 40 por ciento aparece como “parcialmente cumplida” y sólo un 7 por ciento en proceso de cumplimiento.
Morelos está reprobado en protección a las mujeres y respeto a su derecho a una vida libre de violencia. El 2024 muestra ahí un muy mal escenario, junto con los conflictos que diariamente le roban la paz a sus ciudadanos.
Que lejos se ve hoy aquella “eterna primavera”…