Las críticas de mandatarios europeos que condenan los abusos de Israel en suelo palestino se multiplican tras los nuevos ataques en Líbano y una prometida respuesta en contra de Irán.
Europa ya no ve con buenos ojos la ocupación en Gaza y los bombardeos que son cada vez más frecuentes en Líbano, una estrategia que parece una copia de lo que sucedió en la Franja y que desencadenó un genocidio del pueblo palestino. Tampoco les gustaron los ataques a los llamados cascos azules, las Fuerzas de Paz de la Organización de las Naciones Unidas.
Ante este panorama, son más las voces que se suman en el viejo continente para detener la venta de armas a Israel, una propuesta que el gobierno español fue el primero en estudiar tras pedir la suspensión del Acuerdo de Asociación con el gobierno de Benjamin Netanyahu, que según declaró el presidente de España, Pedro Sánchez, intenta “imponer un nuevo orden regional por la fuerza”.
Los gobiernos de Europa también analizan la posibilidad de sancionar a los ministros de extrema derecha de Israel y presionar a Netanyahu para que llegue a un acuerdo y ponga fin al fuego y las miles de muertes.
El apoyo incondicional de la Unión Europea se resquebraja justo cuando se filtraron, a través de la plataforma de mensajería Telegram, documentos confidenciales de Estados Unidos sobre el inminente ataque de Israel a Irán. El otro apoyo incondicional de Israel que también pide un alto al fuego.
No es para menos, a pesar de la incesante propaganda del gobierno de Israel para dibujar a sus vecinos como los enemigos del mundo, las acciones inhumanas de su ejército que violan sistemáticamente el derecho internacional y los derechos humanos, han obligado inclusive a Estados Unidos a exigir a Netanyahu la entrada de ayuda humanitaria en Gaza en los próximos 30 días para continuar con la asistencia militar del país del norte de América.
La nueva incursión del ejército de Israel en Líbano para combatir a Hezbolá fue la gota que derramó el vaso en Europa, sumado a los ataques en el sur en contra de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas para el Líbano que se estableció en la región desde 1978 con tropas extranjeras de España, Francia, Italia y otros países de Europa.
La muerte del número uno de Hamas, Yahya Sinwar, quien estuvo implicado en el atentado terrorista del 7 de octubre del 2023 en suelo israelí, abrió la esperanza de un posible alto al fuego en Gaza, pero fue desechado por Netanyahu al asegurar que puede ser el principio del fin, pero no pone punto final al conflicto.
El rechazo en las calles de distintas capitales europeas también se multiplica ante los abusos del ejército de Israel en contra de la población civil en la Franja de Gaza y otras partes de la región. Dentro de Israel también se pide un alto al fuego y que se busque un acuerdo para que dejen en libertad a los rehenes y puedan regresar con sus familias.
La presión contra el gobierno de Netanyahu aumenta en un momento en el que se espera en cualquier momento un ataque de Israel en respuesta a los más de 200 misiles que Irán lanzó en su contra.
Parece que el primer ministro de Israel se queda sin aliados en Europa en un momento importante que podría marcar el inicio de una guerra total en la región si se realiza el ataque a Irán.
