Son muchas las razones que lo llevaron de nuevo a la Casa Blanca, ya habrá que reconocer que si bien su triunfo, es mayor de lo que se pronosticaba, no es sorpresivo.
Los demócratas fueron diluyéndose a pesar de ejercer el poder y de haberle arrebatado la presidencia a Donald Trump hace cuatro años. El empresario de nuevo presidente no sólo regresa a Washington, sino que además lo hace con un triunfo contundente con mayoría en el Capitolio.
A pesar de los buenos números que deja Joe Biden en la economía, algo pasó que no supieron comunicarlos o que no terminaron por llegar al grueso de la población. La economía, no sólo el dinero, es una de las razones sobre las que gira la vida cotidiana en EU.
Ausencia, mensaje, deslinde en el Edomex
Si los demócratas no tuvieron la capacidad para demostrar avances, los ciudadanos se quedaron con la idea de lo que hizo Trump y lo que eventualmente les benefició, por eso lo quieren de vuelta; recordemos aquello de “es la economía, estúpido”.
Los votantes decidieron no sólo por un personaje que eventualmente pudiera ofrecerles beneficios, muchos de ellos torciendo la ley, también optaron por una forma de vida que Trump tratará de apurar al máximo en estos nuevos cuatro años en que estará en la Presidencia.
Los demócratas nunca entendieron la idiosincrasia y los motivos de los ciudadanos. Tenían una buena candidata, pero muy probablemente llegó tarde ante las dudas que crecieron en la medida que avanzaba la campaña, las cuales no se pudieron borrar del todo. La taciturna participación de Joe Biden nunca dejó de estar en el imaginario colectivo.
EU ha optado al elegir a Trump por cerrar sus fronteras. Optó por una política migratoria que va en contra del propio origen del país, EU es un país de migrantes. No solamente le dio una nueva oportunidad a Trump, sino que además le abrió las puertas de par en par. Los votantes le ofrecieron un abierto espacio al haber sufragado por sus candidatos en el Congreso.
Habrá que preguntarse por qué una buena cantidad de mujeres y jóvenes votaron por el republicano. Kamala Harris, presuponíamos, se había convertido en una opción para las mujeres; sin embargo, el voto no le fue tan adverso a Trump sin que importaran sus innumerables desplantes sobre las mujeres.
Para confirmar la decisión de los ciudadanos es para atender que, a diferencia de otras elecciones, Trump no solamente ganó la presidencia por una gran ventaja en los votos electorales, en esta ocasión también ganó en el voto popular.
Para que nos demos una idea de qué anda pasando en el imaginario colectivo en EU recordemos que los demócratas en las últimas elecciones han ganado con autoridad en esta materia. Hillary Clinton, a pesar de ser derrotada por Trump, le ganó por más de 2 millones de votos; cuando Joe Biden ganó las elecciones hace cuatro años lo hizo por cerca de 3 millones en el voto popular; en esta ocasión, Trump ganó con contundencia rompiendo encuestas y pronósticos.
EU no deja de estar dividido, pero queda claro quién va a ejercer de manera contundente el poder. En su discurso en que reconoce su derrota, a Kamala Harris le queda claro lo que viene y también cómo los demócratas, finalmente quedan desmovilizados. No alcanzaron a entender lo que los ciudadanos querían y a lo mejor tampoco entendieron que EU es una sociedad conservadora a la que le siguen los fantasmas del papel de la mujer, del aborto, de los derechos humanos y la discriminación, particularmente con la migración.
Un elemento final. Los migrantes que residen en EU muy probablemente son quienes estén más en contra de que lleguen nuevos migrantes al país, se notó en su voto.
RESQUICIOS.
Es lamentable que algunos legisladores de Morena, en medio de su soberbia, llenen de elogios a un ministro al que hace menos de dos días increpaban, llamaban corrupto, pero ahora por su voto en la Corte es nacionalista, defensor de la Constitución, y, por si fuera poco, está cerca de ser héroe nacional; lamentable el nivel.