Pep Guardiola es uno de los mejores Directores Técnicos de futbol en el mundo, llevó al Barcelona a ganar 14 títulos en cuatro temporadas y se convirtió en el primer DT en hacer ganar todos los títulos de una temporada al equipo.
Del Barcelona pasó al Bayern de Münich y después en el 2016 llegó al Man City y de allí hasta la fecha. Ha sido uno de los personajes que no ha dejado el fútbol y no se ha alejado de las canchas del todo, quizá después de su cambio entre el Barcelona y el Bayern se tomó un año sabático de dar conferencias, pero siempre cerca del futbol.
Justo en ese inter, debo de presumir y compartirlo, que tuve la suerte de encontrármelo en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México con destino a Nueva York.
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Pep tiene un cúmulo de partidos en su haber, 247 con el Barcelona, 161 con el Bayern y ahora más de 500 con el Manchester City, y la verdad solo por abrumar es un DT que conoce todos los torneos internacionales y se ha movido en las mejores ligas, ha jugado contra todos, ha ganado y pocas veces ha perdido. Champions League, Supercopa de Europa, Premier League, FA Cup, Copa de la Liga, Copa del Rey, Community Shield, Mundial de Clubes.
En quince años suma a su cuenta 39 títulos, 14 en Barcelona, 7 en con el Bayern Munich y 18 con el Man City.
Es Pep el creador del “tiki taka”, del juego de tú a tú con el balón, que muchos hoy lo critican, pero que ha sido su estilo que lo ha hecho ganar todo.
Pero hoy pasa por una crisis, la peor de su carrera y quizá de su vida. El Manchester City arrancó la Premier Legue y suma ya 13 partidos sin triunfo, solo dos han sido empate.
Pep un líder para muchas generaciones dentro y fuera del fútbol ha comenzado a mostrarnos la otra cara del triunfo, del éxito y de la casi perfección. Está sufriendo y nos ha mostrado la desesperación por no retomar el triunfo, 13 fechas consecutivas solo en la Liga Inglesa y en la Champions sin estar en los primeros lugares.
No solo son los gritos desde el banquillo, los distintos gestos de desesperación, enojo y angustia, sino que hace unas semanas nos llevó a otro nivel cuando lo vimos arañado de su frente y un par de golpes en el rostro ¿se los hizo él? ¿se peleó con alguien en el vestidor? Seguramente y todo indica que sí se los hizo él.
Sus jugadores tampoco han encontrado el rumbo, como ayer que fallaron un penalti con el que pudieron haberse reencontrado con el triunfo, pero todo va quedándose a medias y eso los tiene en la derrota.
La foto de hoy es del partido de ayer, en donde de nuevo la impotencia por no encontrar la cuadratura perfecta que tan bien conoce, lo hace desesperarse y llevarse las manos a la cabeza, aunque esta vez sin hacerse daño.
Pep Guardiola nos está mostrando la otra cara de la fama y de la responsabilidad de estar en la cima mundial, porque entre tantos títulos y admiraciones alrededor, también se pierde. La derrota nunca desaparece, es parte de la vida, del camino y del propio éxito.
Estamos siendo testigos de un “todo poderoso” que se rompe, que se vuelve impotente ante no conocer una solución de algo que conoce, maneja, y que lo tiene memorizado. Muchos DT´s prefieren ocultar su rabia y la explotan en vestidor, o donde nadie lo vea.
Pep está explotando ante todos porque está ante algo nuevo para él. ¿Logrará salir de esta? Más allá de que su contrato con el equipo esté hasta el 2027 (recién renovado), ¿podrá reinventarse con los mismos colores?
Esta foto es el reflejo de la incapacidad humana de entender que ante el triunfo también hay derrotas, y duelen, todas duelen.
