DESDE EUROPA

Europa busca implementar modelo Meloni en todo el territorio

Héctor Badillo *Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
Héctor Badillo *Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón. Foto: larazondemexico

En sintonía con lo que sucede en Estados Unidos, la Unión Europea presentó una propuesta muy criticada por los partidos de izquierda y de distintas ONG que pavimenta el camino hacia el endurecimiento de las políticas antimigratorias.

Europa quiere blindarse en medio de la crisis migratoria que se vive en el continente. La derechización de los Gobiernos y el paso firme de la extrema derecha europea han generado una campaña de discriminación y odio hacia las minorías y, especialmente, contra las personas migrantes.

Todo comenzó con la llegada del Gobierno ultraconservador de Giorgia Meloni a Italia y su estrategia antimigratoria para enviar a los extranjeros a centros de deportación fuera de Europa sin importar su estatus migratorio.

Ahora la Unión Europea liderada por la derecha quiere replicar el llamado modelo Meloni, para ser utilizado dentro de los 27 países que quieran enviar a naciones fuera de la Unión a los inmigrantes. La única diferencia del modelo italiano es que sólo se podría desplazar a los migrantes cuya resolución de asilo haya sido denegada en espera de una apelación.

Los Gobiernos europeos tendrán la opción de enviar a los extranjeros que piden asilo en su territorio a centros de deportación, que pueden calificarse sin duda alguna como cárceles en terceros países.

Las Organización No Gubernamentales ya han alzado la voz en contra de estas nuevas políticas migratorias asegurando que abren la puerta a la violación de los derechos humanos de las personas que buscan alternativas de vida.

También alertan de los casos de familias que quedaron separadas ante las deportaciones a estos centros que ya se están construyendo en países extracomunitarios, como Albania.

Ahora en Europa hay una lista de países que considera “seguros”, pero ante la necesidad de territorios en los que se acepten y se puedan abrir más centros de deportación van a aumentar la lista de naciones, lo que no promete resguardar la seguridad y el derecho de los migrantes.

Los dirigentes europeos que apoyan esta polémica medida defienden la propuesta argumentando que es en beneficio de la seguridad en el continente tras la decisión de rearmar a Europa, es decir, el miedo en manos de la discriminación.

Le creciente aceptación de ideologías de ultraderecha, que culpan de todos los males de un país a los inmigrantes, facilita la implementación de estas medidas que vulnera sin duda los derechos humanos.

Los inmigrantes que se atreven a arriesgar la vida en el mar huyen de las guerras, la violencia, la pobreza y hasta los desastres naturales. Nadie debería ser culpable de buscar una vida mejor para ellos y sus familiares. Debemos proteger y alzar la voz por los migrantes.

Temas: