PESOS Y CONTRAPESOS

Talón de Aquiles

*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón. Foto: La Razón de México

Desde hace 44 años el talón de Aquiles de la economía mexicana ha sido el crecimiento, medido por el comportamiento de la producción de bienes y servicios, con los que satisfacemos nuestras necesidades, relacionado con la creación de empleos, ya que para producir alguien debe trabajar, y con la generación de ingresos, ya que a quien trabaja se le paga por hacerlo, empleos e ingresos que son condiciones del bienestar. Mayor crecimiento, mejores posibilidades de mayor bienestar. Y mayor bienestar debe ser el fin de la economía.

Entre 1935 y 1981 el crecimiento promedio anual de la economía fue 6.1%. En 1982, consecuencia de la Docena Trágica, de los gobiernos de Luis Echeverría (1970-1976) y José López Portillo (1976-1982), y sus pésimas políticas económicas, la economía perdió el crecimiento elevado, y de 1982 a 2024 creció, en promedio anual, 2.1%.

Según el promedio de las 41 respuestas recibidas por el Banco de México en la encuesta de febrero a los economistas del sector privado, en los próximos 10 años, de 2026 a 2035, el crecimiento promedio anual de la economía será 1.98% (1.40% según la proyección más pesimista y 3.02% de acuerdo a la más optimista). Suponiendo, según los resultados de la misma encuesta, que este año la economía crezca 0.80% (0.20% conforme a la proyección más pesimista y 2.50% según la más optimista), podríamos sumar 55 años con un crecimiento promedio anual de 2.05%.

¿Cómo empezamos el año en materia de crecimiento? Ya tenemos los datos del Indicador Global de la Actividad Económica, IGAE, para enero, y no son buenos.

En términos anuales (comparando cada mes con el mismo mes del año anterior), en enero de 2023 la economía creció 4.2%. Un año después, en enero de 2024, creció 1.0%. Transcurrido otro año, en enero de 2025, creció 0.0%. En dos años pasamos de 4.2% a 0.0%.

En términos mensuales (comparando cada mes con el mes anterior), en enero de 2023 la economía decreció 0.1%. En enero de 2024, transcurrido un año, decreció más, 0.9%. En enero de 2025, un año después, decreció menos, 0.2%. La buena noticia, la economía decreció menos. La mala, la economía decreció.

¿Qué hay que hacer para conseguir un mayor crecimiento, condición necesaria para lograr un mayor bienestar? Para responder preguntémonos, ¿de qué depende la producción de bienes y servicios? De las inversiones directas, que los empresarios destinan, precisamente, a producir satisfactores, a crear empleos y a generar ingresos. ¿Qué hay que hacer para conseguir un mayor crecimiento? Invertir directamente más. ¿Qué hay que hacer para que directamente se invierta más? Para contestar preguntémonos, ¿de qué dependen las inversiones directas? De la confianza de los empresarios para invertir directamente en el país.

En escala de cero (total desconfianza), a 100 (confianza total), la confianza de los empresarios para invertir directamente en México, en febrero de 2024, fue 40.4. Un año después, febrero pasado, fue 30.6. Baja y bajando.

En diciembre de 2023 la inversión fija bruta (medida por la inversión en instalaciones, maquinaria y equipo), en términos anuales, creció 13.7%. En diciembre de 2024 (último mes para el que tenemos información), decreció 4.1%. Del crecimiento al decrecimiento.

Menor confianza, menos inversiones directas, menor crecimiento, menor bienestar.

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