Sin medidas contracíclicas, 5 años perdidos y pírrico rebote

La luz al final del túnel… La llegada de la vacuna para combatir el Covid-19 inyectó de optimismo a los mercados y recortó la aversión al riesgo.

Como quiera, la batalla contra la pandemia aún está lejos de llegar a su fin. Se debe sortear por ejemplo los alcances de la producción para el abastecimiento de esas curas y las propias jeringas.

Asimismo, la aplicación será un reto por sí mismo dada la enorme resistencia que persiste de algunos grupos...

Cruda realidad… En ese sentido, más allá de los pronósticos color de rosa que ya presentan algunos especialistas, la realidad es que la parquedad seguirá adelante en los siguientes años.

Ayer, durante su presentación anual de perspectivas de Banco Base, Gabriela Siller, economista en jefe de esa institución, puso de nueva cuenta el dedo en la llaga, al resaltar que más allá de las vacunas una pronta recuperación económica no será posible, máxime la pronunciada contracción en la inversión y el consumo, dos de los principales motores del PIB.

Enfatizó que el desembolso de los hogares acumula ya 10 meses de contracciones anuales, el periodo más largo de caídas. Sólo de enero a septiembre ese dínamo que representa el 68% del PIB suma un desplome del 12.3%.

Además, los villancicos y cascabeles no estimularán el consumo en diciembre. Para este mes, se espera una baja anual del 6.6%, dada la debilidad en la confianza y el golpe que recibió el ingreso de las familias mexicanas.

Para todo 2020, se espera que ese indicador cierre con una baja del 11.3%, amén de que no será sino hasta abril de 2021 que podría mostrar un desempeño mensual positivo y ¡ojo!, porque el buen dato se deberá sólo a un efecto rebote…

Largo y sinuoso camino… A su vez, para la inversión el horizonte tampoco es halagüeño. La realidad es que las apuestas de las empresas para la apertura de oficinas o la expansión de su capacidad productiva en el país enfermó antes de la llegada del Covid-19. Lleva ya 20 meses con caídas anuales.

En 2020 la inversión fija bruta podría cerrar con un desplome del 19.2%.

Por si fuera poco, los anunciados planes gubernamentales de infraestructura serán insuficientes para revertir el golpe. En 2021 se calcula que la inversión fija bruta apenas avanzará a razón del 6.7%, lejos de recuperarse.

Bajo esa coyuntura en este 2020, el PIB sufrirá un profundo tumbo del 8.7% y para el 2021 el rebote será de sólo 3.8%, para posteriormente regresar al pírrico impulso anual del 1.5% en los años subsecuentes.

En otras palabras, no será sino hasta 2025 que pudiera alcanzarse una plena recuperación. Así que sin medidas contracíclicas que estimulen el empleo, el consumo y la inversión, 5 años perdidos…

Persiste freno en venta de camiones

A vuelta de rueda… Por desgracia la venta de vehículos pesados mantiene el freno. Durante noviembre la comercialización al menudeo de esas unidades presentó una disminución anual del 15.58%; es decir, que se movieron 471 unidades menos.

Para el año, la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores, que encabeza Guillermo Prieto, anticipa que la caída podría ser cercana al 34%, con una contracción en unidades de 13 mil 817 vs. 2019. Muy en línea con el desplome de la inversión dado que éstos son un bien de capital. Como ve camiones estacionados…