Comercio exterior

¿Cómo vamos en materia de comercio exterior, que nos permite vender en otros países, exportaciones, y comprar en otros, importaciones, expandiendo nuestros mercados, con los beneficios en materia de producción: antes de exportar tiene que producirse, y de consumo: antes de consumir tiene que importarse, sin olvidar la competencia: con las exportaciones competimos en otros mercados y con las importaciones competimos en los nuestros, competencia que obliga a las empresas a volverse más competitivas, capaces de ofrecer a menores precios y/o con mayor calidad y/o con mejor servicio? Ya tenemos, del INEGI, la información para agosto de la balanza comercial.

En agosto las exportaciones, con las que satisfacen sus necesidades, tanto de consumo como de producción, los extranjeros, sumaron 52,359.9 millones de dólares, con un aumento mensual de 10.11 por ciento y anual de 3.8. Entre enero y agosto sumaron 391,787.0 millones, lo cual dio como resultado una variación anual de 3.8 por ciento.

En agosto las importaciones, con las que nosotros satisfacemos nuestras necesidades, sean de producción o de consumo, sumaron 53,737.0 millones de dólares, con un incremento mensual de 10.95 por ciento y decremento anual de 4.3. De enero a agosto sumaron 400,481 millones, lo cual resultó en una variación anual de menos 0.5 por ciento.

En agosto el resultado de la balanza comercial fue deficitario (importamos más de lo que exportamos), por 1,377.1 millones de dólares. Para el período enero – agosto el resultado también fue un deficitario por 8,602.1 millones, déficit comercial que, en contra de lo que puede pensarse de bote pronto, es lo deseable: comprar más de lo que se vende, compras con las que nosotros satisfacemos nuestras necesidades, ventas con las que satisfacen las suyas los otros, déficit que debe financiarse de alguna manera, siendo lo más conveniente que se haga con dólares provenientes de la inversión extranjera directa (véase: https://www.razon.com.mx/opinion/columnas/arturo-damm-arnal/deficit-500282).

Bien que las exportaciones, tanto en términos mensuales como anuales, hayan crecido en agosto (10.11 por ciento mensual, 3.8 por ciento anual). Bien que las importaciones, en términos mensuales, hayan crecido (10.95 por ciento), mal que, en términos anuales, hayan decrecido (4.3 por ciento).

En términos anuales, en agosto, las exportaciones petroleras, que representaron el 5.81 por ciento del total, decrecieron 4.6 por ciento, mientras que las no petroleras, que representaron el 94.19 por ciento, crecieron 4.3 por ciento.

En agosto, en términos anuales, las importaciones petroleras, que representaron el 8.88 por ciento del total, decrecieron 37.1 por ciento, mientras que las no petroleras, que representaron el 91.12 por ciento, crecieron 0.8 por ciento: 7.5 por ciento las de bienes de consumo (que se usan para satisfacer necesidades); menos 8.6 las de bienes intermedios (que se usan para la producción, por ejemplo, materias primas); 18.2 por ciento las de bienes de capital (que se usan para producir satisfactores), siendo este resultado, directamente relacionado con las inversiones directas, que producen satisfactores, crean empleos y generan ingresos, el más importante de la balanza comercial.