Arturo Damm Arnal

Del trabajo

PESOS Y CONTRAPESOS

Arturo Damm Arnal*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
Arturo Damm Arnal
*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
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Ya tenemos, del Inegi, la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, para el primer trimestre del 2023. ¿Cómo nos fue durante los tres primeros meses del año? Comparo los resultados del primer trimestre de este año con los del último del 2022.

La tasa de desocupación, durante el último trimestre del 2022, fue 2.7 por ciento de la Población Económicamente Activa, PEA, compuesta por los mayores de 15 años que buscan trabajo: si lo encuentran se vuelven Población Ocupada, PO; si no lo encuentran, y siguen buscando, son Población Desocupada, PD. A lo largo del primer trimestre del 2023, la tasa de desocupación fue 3.0 por ciento de la PEA. Aumentó la desocupación.

En condición de ocupación parcial y desocupación, la PO que trabajó menos de 15 horas semanales más la PD, se encontró 8.3 por ciento de la PEA a lo largo del último trimestre del 2022 y 9.0 durante el primero del 2023. Aumentó la ocupación parcial y desocupación.

La tasa de presión general, que incluye, además de la PD, a la PO que busca otro trabajo, fue 5.8 por ciento de la PEA en el último trimestre del 2022 y 5.9 en el primero del 2023. Aumentó la presión general.

En condición de subocupación, PO que tiene la necesidad y la disponibilidad de trabajar más horas, pero sin la posibilidad de hacerlo, se encontró 7.3 por ciento de la PO en el último trimestre del 2023 y 7.5 en el primero del 2023. Aumentó la subocupación.

La tasa de condiciones críticas de ocupación, que incluye a quienes trabajan menos de 35 horas a la semana; o más de 35, pero ganando menos de un salario mínimo (menos de 312.41 pesos diarios); o más de 40, pero ganando hasta dos salarios mínimos (hasta 624.82 pesos al día), fue 33.3 por ciento de la PO a lo largo del último trimestre del 2022 y 30.4 durante el primero del 2023. Reducción de la condición crítica de ocupación.

En condición de informalidad laboral, la PO laboralmente vulnerable por la naturaleza de la unidad económica para la que trabaja, más la PO cuyo vínculo o dependencia laboral no está reconocida por su fuente de trabajo, se encontró, durante el último trimestre del 2022, 55.1 por ciento de la PO y nuevamente 55.1 a lo largo del primer trimestre del 2023. Sin cambio en la informalidad laboral.

La tasa de ocupación en el sector informal, PO que trabaja para una unidad económica que opera a partir de los recursos del hogar, pero sin constituirse como empresa, por lo que dicha actividad no tiene una situación identificable e independiente de ese hogar, fue 28.2 por ciento de la PO en el último trimestre del 2022 y 28.1 en el primero del 2023. Reducción del sector informal.

La Población No Económicamente Activa Disponible, PNEAD, integrada por los mayores de quince años que no buscan trabajo, pero que si les ofrecieran uno lo aceptarían, fue 13.7 por ciento de la Población No Económicamente Activa, PNEA, a lo largo del último trimestre del 2022 y 13.6 durante el primero del 2023. Reducción de la PNEAD.

Por último, si a la PD le sumamos la PNEAD, para obtener la que podemos llamar la tasa de desempleo real, TDR, tenemos que, en el último trimestre del 2022, 11.9 por ciento de la PEA estuvo en tal condición, mientras que en el primero del 2023 lo estuvo 11.7. Reducción de la TDR.

Así nos fue durante el primer trimestre del año, en materia de empleo.