Empleo, mejorando

PESOS Y CONTRAPESOS

Arturo Damm Arnal<br>*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.<br>
Arturo Damm Arnal*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón. Foto: larazondemexico

¿Cómo nos fue, en materia de empleo, en noviembre?

Según los Indicadores de Ocupación y Empleo, del INEGI, en noviembre la Población Ocupada (PO) fue el 97.2 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA), por lo que la Población Desocupada (PD) fue el 2.8 por ciento. La PEA está compuesta por los mayores de 15 años que buscan trabajo: si lo encuentran se vuelven PO; si no lo encuentran, y siguen buscando, son PD. Un mes antes, en octubre, la PO fue el 96.7 por ciento de la PEA y la PD el 3.3 por ciento. Los resultados de noviembre fueron mejores.

En noviembre la Tasa de Participación (TP), que es la PEA como porcentaje de la población mayor de 15 años, fue 60.8. Un mes antes, en octubre, fue 59.6 por ciento. Los resultados en noviembre mejoraron.

En noviembre la Población Subocupada (PS), compuesta por la PO con necesidad y disponibilidad para trabajar más, pero sin posibilidad de hacerlo, fue el 7.6 por ciento de la PO. Un mes antes, en octubre, fue el 7.5 por ciento. Los resultados de noviembre fueron peores.

En noviembre la Población Ocupada Parcialmente y Desocupada (POPD), formada por quienes trabajaron menos de 15 horas a la semana más la PD, fue el 9.1 por ciento de la PEA. Un mes antes, en octubre, fue el 9.3 por ciento. Los resultados en noviembre mejoraron.

En noviembre la Población en Condiciones Críticas de Ocupación (PCCO), integrada por la PO que trabajó menos de 35 horas semanales, o más de 35 pero ganando hasta un salario mínimo, 172.87 pesos diarios, o más de 48 pero ganando hasta dos salarios mínimos, 345.74 pesos al día, fue el 29.9 por ciento de la PO. Un mes antes, en octubre, fue el 30.9 por ciento. Los resultados de noviembre fueron mejores.

En noviembre la Población en Condiciones de Informalidad Laboral (PCIL), constituida por la PO laboralmente vulnerable por la naturaleza de la unidad económica para la que trabajan, más aquellas cuya relación laboral no está reconocida por el empleador, fue el 55.2 por ciento de la PO. Un mes antes, en octubre, fue el 55.4 por ciento. Los resultados en noviembre mejoraron.

Por último, en noviembre, la que llamo Tasa de Desocupación Real (TDR), compuesta por la PD más la Población Desocupada Disponible (PDD), compuesta por los desempleados que no buscan trabajo pero que, si se les ofreciera uno, lo aceptarían (desempleados desesperanzados), fue el 11.84 por ciento de la PEA. Un mes antes, en octubre, fue el 12.07 por ciento. Los resultados de noviembre fueron mejores.

De las siete variables consideradas en seis (PO, PD, TP, POPD, PCCO y PIL) los resultados de noviembre mejoraron con relación a los de octubre y solo en una (PS) empeoraron ligeramente, lo cual, desde el punto de vista del bienestar, tiene que ver con una de las caras de la moneda, el empleo. La otra tiene que ver con el ingreso.

Tres son, en materia de empleo, los retos: crear más empleos; crearlos en el sector formal; mejor remunerados, nada de lo cual se logra por decreto, sino creando las condiciones de seguridad y confianza (Estado de Derecho), para que se invierta directamente más, mucho más, de lo que se ha invertido, inversiones directas de las que dependen la creación de empleos y la generación de ingresos, condiciones del bienestar, inversiones directas que hoy se encuentran al nivel que ya habían alcanzado en 2013. Sí, ¡2013!

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Jacqueline L'Hoist Tapia