Según los resultados de la encuesta de diciembre, del Banco de México a los especialistas en economía del sector privado, y tomando en cuenta el promedio de las 37 respuestas recibidas, en 2022 la economía crecerá 2.79 por ciento (1.90 la expectativa más pesimista, 4.00 la más optimista), y 2.21 por ciento en 2023 (1.50 la expectativa más pesimista, 3.29 la más optimista). En materia de inflación la expectativa para 2022 es 4.22 por ciento (3.50 la más optimista, 7.01 la más pesimista), y 3.72 por ciento para 2023 (3.10 la más optimista, 6.00 la más pesimista). De cumplirse estas expectativas habremos regresado, después de tres años atípicos (2019, 2020 y 2021), a la normalidad.
¿Qué es lo normal, en materia de crecimiento e inflación, para la economía mexicana, crecimiento que se mide por el comportamiento del Producto Interno Bruto, inflación que se mide por el comportamiento del Índice Nacional de Precios al Consumidor?
De 2001 a 2018, antes de los tres años atípicos, el crecimiento promedio anual de la economía fue 2.54 por ciento, y la inflación, también promedio anual, fue 4.33 por ciento. Este es el comportamiento normal de la economía mexicana, en materia de dinamismo (producción y por ello empleo e ingreso), y estabilidad (índice de precios y por ello poder adquisitivo del dinero). Las expectativas para 2022 y 2023 (crecimiento de 2.79 y 2.21 por ciento, e inflación de 4.22 y 3.72), están dentro lo normal para la economía mexicana, normalidad que, sobre todo en materia de crecimiento, deja mucho que desear. Que sea lo normal no quiere decir que sea lo mejor, ni muchos menos lo ideal.
2019, 2020 y 2022 fueron años atípicos, con crecimientos (de hecho decrecimientos), o muy por debajo de lo normal (menos 0.3 en 2019 y menos 8.5 en 2020), o muy por arriba (5.6 estimado para 2021). Los resultados atípicos de 2019 se debieron al Efecto 4T, y a las presiones recesivas que generó. Los de 2020 a la conjunción del Efecto 4T con el Efecto Covid, que con sus propias presiones recesivas reforzó las del primero, sobre todo durante el primer semestre. Los de 2021 se debieron al Efecto Rebote, consecuencia de que el punto de comparación fue tan bajo (2020), que el resultado final fue, comparado con lo que es normal (2.54 por ciento), muy bueno (5.6 estimado).
A la pregunta por el crecimiento de la economía en los próximos diez años (2023-2033), la media de las respuestas fue 2.22 por ciento (3.25 la expectativa más optimista, 1.60 la más pesimista), por debajo del promedio entre 2001 y 2018, 2.54. Malo.
A la pregunta por la inflación para los próximos cinco a ocho años (2023 – 2030), la media de las respuestas fue 3.55 por ciento (4.00 la expectativa más pesimista, 3.00 la más optimista), por debajo del promedio entre 2001 y 2018, 4.30. Bueno.