En poco más de dos meses serán las elecciones en México y en gran medida se va a definir el futuro de México. Mucho está en juego y es una disputa enorme.
Hoy los partidos políticos quieren poner a sus candidatos, hay de todo: bueno, regular y malo en todos lados. Pero también está el crimen organizado que también se está jugando su futuro en esta próxima elección y buscan controlar ciertos territorios, y por eso hemos visto tanta violencia y asesinatos de candidatos, sobre todo a nivel local.
Para ellos es muy importante tener autoridades aliadas para poder traficar droga, migrantes, trata de personas y poder cobrar derecho de piso, y para eso necesita cooptar a los policías y autoridades locales.
Muchas veces si un candidato no les conviene, simplemente lo matan. Lo hemos visto mucho en estados, donde el crimen organizado está desatado. Y es que por ejemplo, con el cobro de piso a empresarios que siembran, por decir, limón o aguacate, se generan millones de pesos. Por eso hemos tenido el alza de precios en estos productos, por el “impuesto” que cobran los criminales.
La violencia que se vive se refleja en lo ocurrido en Maravatío el pasado 27 de febrero, donde los dos candidatos a la presidencia municipal fueron asesinados con una diferencia de cinco horas.
El primero era candidato de Morena, Miguel Ángel Zavala, quien se encontraba dentro de su coche cuando dos sujetos armados le dispararon de manera directa.
Ese mismo día, asesinaron por la noche a Armando Pérez Luna, aspirante del PAN a la misma alcaldía. El crimen ocurrió cuando un sujeto a bordo de una motocicleta se acercó a la víctima y le disparó en varias ocasiones, para luego huir del lugar.
El año pasado en el municipio de Chilpancingo también hubo asesinatos, recordemos a la alcaldesa de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández, a quien se le vio en un video con unos narcotraficantes reconocidos en la zona. Ella misma reconoció haberse reunido con el líder de Los Ardillos, uno de los grupos del crimen organizado que controla la entidad.
“[La reunión] fue algo fortuito. Hubo alguna circunstancia y yo lo que pido es que esperemos a que la Fiscalía General de la República investigue”, ha reconocido la alcaldesa de Morena después de la filtración del video.
Días después de esa reunión aparecieron los cadáveres de cuatro personas en la carretera federal Chilpancingo-Acapulco, entre Palo Blanco y Petaquillas; aseguran que fue una llamada de atención a la alcaldesa.
Por cierto, en esta zona el precio del pollo y la tortilla lo controlan estos grupos criminales, y después de ver el video donde se ve cómodamente a la alcaldesa de Chilpancingo con estos grupos, es difícil de creer que no los está protegiendo.
Van 22 homicidios en 2024
Y éste es el claro ejemplo de la violencia que vamos a ver en muchas zonas de país.
Por eso vemos que los aspirantes más afectados, amenazados y asesinados han sido aquellos que compiten por un puesto local, como una alcaldía o una diputación.
De acuerdo con organizaciones civiles como Data Cívica, de noviembre a marzo de este año 23 políticos han sido asesinados, alcaldes, candidatos, regidores y políticos. De estas personas asesinadas 13 buscaban un cargo en las elecciones del próximo 2 de junio.
Si Zacatecas ya era uno de los estados con mayor violencia en todo el país, además de afectar, hay una brutalidad contra los políticos o familiares de ellos. Quien era director de Desarrollo Social del Ayuntamiento de Fresnillo, Juan Pérez Guardado, fue atacado a balazos cuando trabajaba en un camellón de la avenida central del municipio.
Poco después, también mataron al sobrino del gobernador del estado, David Monreal. Jorge Antonio Monreal, también funcionario del municipio, fue asesinado a tiros a la salida de su domicilio.
En febrero pasado fue asesinado a balazos Manuel Hernández, candidato a diputado local en Veracruz. El candidato de Morena se había desempeñado como director general de Política y Gobierno del ayuntamiento de Misantla.
Y así podríamos recorrer casi toda la República mexicana hablando de asesinatos.
A quienes también les preocupa mucho esta violencia es a la Iglesia católica, quienes están en los lugares más violentos del país. Solicitaron a los tres candidatos firmar un compromiso por la paz. Claudia Sheinbaum, Xóchitl Gálvez y Jorge Máynez ya lo firmaron.
De forma individual, cada uno acudió al Auditorio Alfonso García Robles del Centro Cultural Tlatelolco para firmar este compromiso. Esperemos que no sea un mero acto de campaña.
Y es que la seguridad para todos los mexicanos debe ser prioridad en un país que suma 180 mil homicidios dolosos tan sólo este sexenio. Estamos hablando de un homicidio cada 15 minutos.
Hasta el momento, la titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, ha dicho que las dos candidatas y el candidato a la Presidencia de México han solicitado protección durante el proceso electoral y que también lo han pedido tres aspirantes a gubernaturas, siete candidatos al Senado y 10 a diputaciones federales.
La Secretaria explica que se llegó al acuerdo de que el Gobierno federal sea quien asegure la protección de candidatos a la presidencia, a gobernador de los nueve estados que están en contienda, y al Congreso de la Unión, y aclaró que los aspirantes a un cargo local sólo pueden tener protección del gobierno estatal o de la alcaldía donde buscan un cargo.
Lo grave es que muchos gobiernos estatales no pueden garantizar la seguridad de los aspirantes locales y son ellos quienes están muy expuestos. Pero además, muchas autoridades municipales están coludidas con el crimen organizado, ¿qué protección le van a dar a los que no están con ellos?
Recordemos que el Instituto Nacional Electoral (INE) anunció un proyecto para proteger a los candidatos, pero sin grandes detalles.
Habló de que se clasificaría a las regiones en alta, media y baja incidencia delictiva, además se tomaría en cuenta las amenazas previas contra los aspirantes.
¿Y qué puede hacer el INE para resguardar la seguridad de candidatos? La seguridad del país es responsabilidad de los gobiernos y no estamos viendo que la puedan garantizar.