Beethoven/Bizet y Medio Oriente

LAS CLAVES

*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
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Afirman los cronistas de la época que la noche del 16 de diciembre de 1770 una tremenda borrasca se desencadenaba de las Siete Montañas y descargaba su furia sobre la ciudad de Bonn, orillas del Rhin, Alemania; la brisa gélida vapuleaba los portones y tragaluces de las casas, la lluvia se desplomaba obstinada y tempestuosa: en esa tenebrosidad nocturna llegaba al mundo Ludwig van Beethoven, un músico de temperamento tempestuoso, que escucho en estos días de aciagos hechos en Medio Oriente.

Me sumerjo en Seis bagatelas para piano, Concierto para piano y orquesta No. 5, Cuarteto No. 13, Obertura Leonora III, Sonata para piano No. 29. Llego a los diques de Sonata para violonchelo y piano y Sinfonía No. 6. Pastoral (pieza sinfónica que más disfruto después de la Sinfonía No. 45, de Haydn): Beethoven en estas horas de perplejidades. 

Sabemos que desde la niñez mostró notables destrezas para la música. El padre intentó hacer de él un niño prodigio: lo obligaba a estudiar en encierro absoluto y maltratos. A los ocho años de edad lo lleva a Colonia para que ejecute un Concierto de piano, y en 1781 lo fuerza a una gira por Holanda que fue un rotundo fiasco. Estudia a profundidad el Clavecin bien temperado, de Bach. A los 16 años visita a Viena: conoce a Mozart de quien recibe consejos. “Escuchen a este joven; no lo pierdan de vista, alguna vez hará ruido en el mundo”, comentaría el autor de Don Giovanni.

Azote de la sordera a los 26 años. Sensibilidad exteriorizada en exaltados impulsos, alegría, congoja y melancolía: música palpitante de pasión espiritual excedida. Beethoven sería hoy --comentan los musicólogos—un popular compositor de jazz/rock. En la cronología del arte europeo de las últimas dos centurias no hay personalidad que haya influido de forma tan cabal en el progreso posterior de la música como lo hizo él en un itinerario del clasicismo hasta los inicios del romanticismo.  

Compositor, director de orquesta y pianista: legó 32 Sonatas para piano, Seis Bagatelas para piano, 16 Cuartetos, 7 Tríos, 10 Sonatas para violín y piano, una ópera (Fidelio), una Missa solemnis, cinco Conciertos para piano y orquesta, un Concierto para violín y orquesta y 9 Sinfonías (destacan, por sus propuestas revolucionarias, la Tercera, “Eroica” —apuntes románticos—, la Quinta —un único motivo rítmico en los cuatro movimientos—, la Sexta, “Pastoral”, y la Novena: (primera polifonía coral de la historia).  

L’ Arlésienne, de Georges Bizet: pieza que pone de manifiesto la capacidad del autor de Carmen para integrar gamas y costuras folclóricas. “Preludio”, “Intermedio”, “Adagietto”, “Carillón”. Atrapa la sonoridad del saxofón en el primer tiempo y las exaltaciones de las cuerdas en el Adagietto

Veo en la televisión los edificios bombardeados. Las muertes en 6 días: mil 300 en Israel; mil 500 en Palestina, además de 420 mil desplazados. Entono los versos del himno de la Alegría: “¡Alegría! El más bello fulgor divino / Todos los hombres serán hermanos”: paradójico anhelo de Beethoven que contrasta con la azarosa situación política del mundo de hoy. Las tempestades de Beethoven y las rimbombancias de Bizet: en Medio Oriente una madre busca a uno de sus hijos entre los escombros.

Sinfonía 6 / Beethoven
Sinfonía 6 / BeethovenFoto: Especial

Sinfonía 6 / Beethoven

  • Artista: Filarmónica Festspielorchester
  • Género: Orquestal
  • Disquera: Master Classic