Los radicales de Morena

SOBRE LA MARCHA

Carlos Urdiales&nbsp;<br>*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.<br>
Carlos Urdiales *Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón. larazondemexico

Ricardo Monreal está metido en un lío. En los pasillos del Senado se habla de su salida de la presidencia de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), factótum de poder al interior de la Cámara alta. Para agosto después de las elecciones y antes de la definición del proyecto presidencial para 2024, —que no será él—.

Su lance en contra de los radicales de Morena, alebrestados por la temprana carrera sucesoria, y alertar el peligro que representan para el proyecto transformador, fue quizá la gota que derramó el vaso de la tolerancia de AMLO.

En el tablero de quien manda, Monreal tuvo opciones, empoderarse en el Senado o ser Jefe de Gobierno de la Ciudad de México. Cierto que si la candidata es ya sabe quien, la sucesión local debería ser su potestad, pero en el ecosistema creado por la Cuarta Transformación, es viable la imposición; “tú serás candidata A y yo decidiré al candidato B, según la necesidad coyuntural del proyecto”.

Sin embargo, Ricardo Monreal dobló su apuesta —se radicalizó— cuando sentenció; no quiero gobernar la Ciudad de México, quiero ser Presidente de México. Clausurar esa salida de emergencia en su horizonte frente a un líder que no se deja tripular ni presionar por nadie, al costo que sea —2006 y el SNTE de Elba— es un búmeran que amenaza con descontarlo más temprano que tarde.

Los no radicales, los leales al proyecto más que al líder, tampoco brillan en el escenario, no se ve por dónde Monreal pueda encabezar una falange morena que enfrente al Presidente López Obrador en la construcción de su sucesión.

Marcelo Ebrard ha sido solidario, pero no parece hasta ahora dispuesto a ir más allá de un tuit solidario con su amigo zacatecano. En todo caso el canciller está más cerca de ser un plan B del mandatario de lo que lo está Monreal, y ese capital no lo va a empeñar por causa ajena. No por el momento.

Ricardo Monreal además enfrenta otra batalla a través de José Manuel del Río Virgen, preso en Veracruz, lo que generó nuevo polo de tensión con el gobernador Cuitláhuac García.

Asunto que concentra a conspicuos enemigos presurosos para interpretar las señales que desde el bullpen de Palacio Nacional salen a los jardines del movimiento. La alerta de Monreal sobre el peligro de radicalizarse le viene como anillo al dedo al propio senador zacatecano.

Conacyt vs. CIDE, ¡oootra vez! Mañana a las nueve de la mañana el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) sesionará en Asamblea, pretende modificar el Estatuto General del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) para “legalizar” a posteriori las irregularidades cometidas en su contra. Todo, sin someterlo al Consejo Académico del CIDE, como marcan los estatutos.

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