El día de ayer, desde la ciudad de Oaxaca, el Presidente de México y su equipo de trabajo anunciaron la primera etapa del plan de vacunación que tiene por objeto dar prioridad a los adultos mayores avecindados en los municipios más alejados del territorio nacional de recibir las primeras dosis. El trabajo en equipo que realizan integrantes de los gobiernos estatales, municipales y el federal, liderados por el Presidente de México, será determinante para aplicar la vacuna de manera eficiente, debilitar y vencer al Covid 19, y con ello reactivar la economía.
En México existen poco más de 15 millones de personas mayores de 60 años. Con datos de los levantamientos que realiza el Inegi sabemos que, poco más del 10 por ciento de ellos vive solo y cerca del 70 por ciento del total tiene algún tipo de discapacidad. Por las condiciones propias de su edad, el riesgo de caer enfermos es alto y la posibilidad de recuperarse apropiadamente es menor.
Nuestros adultos mayores son una fuente inagotable de experiencia y conocimiento. Desafortunadamente en muchas ocasiones no les damos el lugar que merecen. Entre los retos más complejos que enfrentan está su situación económica, que en muchas ocasiones dependen de sus familiares ante la imposibilidad de ser empleados o emprender y atender algún negocio; poco más del 40 por ciento de los adultos mayores de nuestro país son económicamente activos. Otro de los grandes retos que enfrentan es el de contar con el auxilio de alguien para la realización de sus actividades de rutina.
Esta semana fuimos testigos de un hecho vergonzoso y doloroso de maltrato a un adulto mayor. Un hombre fue captado en video golpeando a una anciana en la alcaldía Tlalpan en la Ciudad de México; se conoció que él era su hijo y ella tiene 95 años. Acciones como éstas lamentablemente suceden de manera frecuente. La Organización Mundial de la Salud ha revelado que uno de cada 10 ancianos ha sido víctima de malos tratos. La posibilidad de que ellos denuncien a las autoridades el trato que sufren es bajísima.
Seguramente todas las etapas de la vida tienen complicaciones y momentos de bienestar y felicidad; sin embargo, la vulnerabilidad que enfrentan nuestros adultos mayores requiere atención. Quizás sí, como alguien decía, sería mejor que la vida fuera al revés; empezar anciano y terminar la existencia rodeado de amor en brazos de mamá.
Hoy, a causa del Covid-19 los adultos mayores vuelven a ser una prioridad. Es importante ajustar las políticas públicas para poder brindarles siempre un trato prioritario y adecuado, que garantice que esa última etapa de la vida se viva con decoro y dignidad.
Este gobierno ha puesto en primer lugar a los adultos mayores. Sus programas sociales y decisiones lo demuestran. El Presidente Andrés Manuel López Obrador ha estado comprometido con ellos y con sus causas a lo largo de su existencia. Ellos recibirán la vacuna primero, un acierto que salvará la vida a muchos que hoy están en riesgo de muerte.
