La semana pasada se dio el regreso “triunfal” del Presidente Andrés Manuel López Obrador a las mañaneras. Tras dos semanas sin acusaciones hacia los conservadores o los liberales, volvimos a las confrontaciones.
Y uno de esos señalamientos del mandatario fue sobre la cantidad de vacunas contra el Covid-19 que se hubieran comprado con los recursos que se desviaban... sí, en tiempo pasado, porque según él ahora ya no ocurren estos actos de corrupción.
Desde este espacio yo quisiera lanzarle cuatro preguntas sobre los 20 millones de pesos en contratos que se otorgaron por adjudicación directa —desde la Oficina de la Presidencia y sólo en 2020— a su proveedora consentida Yazmín Adriana Bolaños López. Por cierto, todo un misterio el caso de esta mujer con domicilio fiscal en la colonia Obrera y ex beneficiaria de programas sociales, pero que ahora se embolsa una millonada gracias a la 4T.
Pero ésa es otra historia... aquí mis preguntas:
¿Cuántas vacunas hubiéramos comprado, Presidente, con los tres millones 370 mil pesos que se pagaron a Yazmín Bolaños por el “Servicio Integral para la organización del evento de conmemoración del Día del Ejército Mexicano” el 19 de febrero?
¿Cuántas vacunas se podrían comprar con los 144 mil pesos que se le pagaron a esa señora por el “Servicio Integral para la organización del evento de conmemoración del aniversario luctuoso de Francisco I. Madero y José María Pino Suárez” el 23 del mismo mes?
¿Cuántos insumos médicos y tanques de oxígeno se pudieron haber pagado con los 96 mil pesos más que se le pagaron también desde la Dirección de Recursos Materiales y Servicios Generales de la Unidad de Administración y Finanzas a la proveedora consentida del Gobierno, por las sillas, mesas y la organización del “Servicio Integral para la organización del evento Informe de Actividades del Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador” el día 5 de abril?
Por cierto, esos “informes” en momentos de pandemia y cuando existen apremios más relevantes debieran de suspenderse, porque no informan absolutamente nada.
Finalmente ¿cuántas vacunas y tratamientos se pudieron haber pagado con los 14 millones 744 mil pesos que costó el “Servicio Integral para la organización del evento conmemoración del 210 aniversario del grito de Independencia de México”? Ese grito ante un Zócalo vacío, usted recordará.
Ahora que inicia el plan nacional de vacunación contra el Covid-19 ¿cuántas vacunas pudimos comprar con esos casi 20 millones de pesos?, y ¿cuántas podremos comprar con los millones y millones que se le siguen otorgando en contratos a la proveedora número uno del Gobierno federal?
En el baúl. Hoy cumplimos un año escribiendo historias desde las cloacas políticas en La Razón. Ha sido un año difícil para todos, pero hay que estar agradecidos, porque si usted y yo nos seguimos leyendo y escribiendo, quiere decir que no nos ha ido tan mal; es por eso que el agradecimiento es para ustedes, los lectores, que nos siguen y nos replican, pero, sobre todo, que nos favorecen con su confianza y, por supuesto, también para los directivos de esta casa editorial que apostó a brindarnos este espacio para seguir ejerciendo desde aquí la libertad de expresión.
¡Regresaréééééé!
