Dos de las varias iniciativas que el Presidente Andrés Manuel López Obrador envió al Congreso de la Unión en semanas recientes han motivado más contras que pros por las graves consecuencias que tendrán: una es la de subcontratación-outsourcing, que se decidió dejar pendiente en la Cámara de Diputados hasta el próximo periodo de sesiones, y la otra, la de reforma al Banco de México para captación de divisas, aprobada por el Senado.
En el caso de la primera, que no solamente ya dividió a la Iniciativa Privada, que la rechaza, sino también a inversionistas extranjeros que coinciden en que, si llegara a recibir luz verde en San Lázaro, provocará el despido masivo de personal y que las empresas extranjeras frenen sus inversiones y, en los cambios al Banxico, porque vulnera su autonomía por el riesgo de propiciar lavado de dinero.
DE ESTO Y DE AQUELLO…
Gerardo Esquivel, subgobernador del Banco de México, propuesto por el Presidente para ocupar ese cargo desde el año pasado, es uno de los funcionarios que reaccionó en contra de esa modificación, porque coincide con las opiniones de organismos empresariales, como la Confederación Patronal de la República Mexicana, en que vulnera la autonomía de la misma, al determinar sus acciones de compra de divisas.
La Coparmex, presidida por Gustavo de Hoyos, advirtió que esa reforma para la captación de recursos puede significar daños irreparables para la estabilidad macroeconómica del país y demanda que la Cámara de Diputados enmiende lo aprobado por el Senado, ante el riesgo que representa que el banco central adquiera dinero incautado por el Gobierno federal proveniente de actividades ilícitas.
Por su parte, Larry Rubin, presidente de The American Society of México, declaró que cuando los legisladores decidan lo que debe ser la regulación del outsourcing, deben tener muy presente que las empresas estadounidenses tienen oportunidad de invertir miles de millones de dólares y que “México no es el único”, al dar a entender que podrían irse a otras naciones.
Tras la denuncia de que la empresa suiza Vitol pagó sobornos millonarios a funcionarios de Pemex el sexenio pasado y en el actual, el Presidente López Obrador anunció que se investigará quiénes los recibieron en su Gobierno con el ofrecimiento de obtener contratos millonarios, al reiterar que “nosotros no somos tapadera de nadie”.
La “encuesta” de Morena entre los aspirantes a la candidatura a gobernar Campeche fue ganada por Layda Sansores, la alcaldesa morenista de Álvaro Obregón, que durante muchos años soñara con seguir los pasos de su padre, el extinto Carlos Sansores Pérez, quien gobernara esa entidad, cargo al que llegó postulado por el PRI de entonces.
