Al salir en defensa de las dependencias gubernamentales acusadas por el GIEI de no entregar información que poseen sobre el caso Ayotzinapa, el Presidente López Obrador alentó nuevamente la esperanza de los familiares de los 43 normalistas de que pudieran estar vivos, por asegurar que tras romperse el llamado “pacto de silencio”, ya tiene una aproximación de lo que ocurrió y quiénes fueron los responsables, pero que “lo que más nos importa es saber en dónde están y en ello se trabaja”.
Dijo que respeta el reporte de los “expertos independientes”, pero no lo comparte, y asegura que con la colaboración de Sedena y Marina se ha logrado avanzar y al comentar que una cosa son las instituciones y otra son los funcionarios públicos, que no por el hecho del mal comportamiento de un funcionario, se va a manchar una institución, contradijo lo que ha sostenido en el caso de Genaro García Luna, extitular de Seguridad Pública, al ordenar la desaparición de la Policía Federal.
DE ESTO Y DE AQUELLO...
Oootra vez, tardíamente, el Consejo General del INE aprobó los lineamientos para regular actividades de los candidatos presidenciales de Morena y el Frente Amplio de México —que es lo que en realidad son— cuyo tope de gastos será de hasta 34 millones de pesos, cuando están por concluir sus disfrazadas campañas por todo el país, tras inundarlo de propaganda electoral que ahora les ordenó retirar, aunque finjan ignorar quiénes la instalaron.
Los consejeros rechazaron la exigencia morenista de que Xóchitl Gálvez y Santiago Creel, los dos más aventajados aspirantes del opositor Frente Amplio por México, solicitaran licencia a sus cargos de senadora y diputado federal que, sobre todo ella, se ha convertido en blanco preferido de ataques, para hacerla desistir de alcanzar la postulación presidencial.
La consejera electoral Dania Ravel solicitó al INE que se investigue el encierro bajo llave de reporteros para impedirles que cubrieran la reunión privada de sus colegas con los gobernadores, el martes pasado, que ha merecido fundadas sospechas sobre lo abordado, porque sólo fueron los de Morena y no la totalidad de la Conago.
Chilpancingo, al igual que varios municipios de Chiapas, siguen teniendo altos niveles de violencia, junto con otros de Colima y Zacatecas, controlados en gran parte por el crimen organizado, lo que no impide que oficialmente se minimice lo que ocurre.
Mujeres, jóvenes y la “aspiracionista” clase media, los sectores que han sido más vapuleados en las mañaneras este sexenio, representarán el mayor riesgo en las elecciones del año próximo para el partido que gobierna, no obstante el actual triunfalismo presidencial.
