El Presidente Andrés Manuel López Obrador planteó a su homólogo de Estados Unidos, Joe Biden, y al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, emprender una acción conjunta con un programa de inversión productiva en América del Norte que logre sustituir las importaciones y hacer frente a la competencia de otras regiones, al reconocer que la ratificación del T-MEC fue una acertada decisión para la integración económica de los países firmantes y ser el mejor instrumento para hacer frente a la expansión productiva de China.
En esa reunión trilateral en la Casa Blanca llamó a eliminar mitos y prejuicios y dejar de rechazar migrantes, porque para crecer se necesita su fuerza de trabajo de la que en realidad carecen con suficiencia tanto Estados Unidos como Canadá, para lo cual, propuso un estudio de la demanda de mano de obra que permita ordenar el flujo migratorio, hoy convertido en uno de los más graves problemas que enfrentan los tres países.
DE ESTO Y DE AQUELLO…
Mientras su jefe está en la Casa Blanca –la de Washington– Mario Delgado, presidente de Morena, incluyó pública y formalmente al secretario de Gobernación, Adán Augusto López, como un cuarto prospecto en la sucesión presidencial de 2024, y reiteró que “la encuesta” para elegir al candidato de ese partido, que Ricardo Monreal, líder del Senado y otro de los aspirantes, rechaza, es el mejor mecanismo para ello.
Según el excoordinador de la bancada morenista e identificado como el más allegado al canciller Marcelo Ebrard, otro de los precandidatos que igual que Claudia Sheinbaum son los mencionados para suceder al Presidente López Obrador, la encuesta establecida en los estatutos de Morena “es el mecanismo que nadie puede controlar, es la gente directamente quien decide”, lo que ni él mismo cree.
José Ángel Gurría, exsecretario general de la OCDE, declaró que si el Gobierno de México quiere hacer una Reforma Energética que quiere cambiar todo lo hecho antes, “debe considerar que habrá costos, por las consecuencias legales y financieras que afrontará”, con lo que el también exsecretario de Hacienda y de Relaciones Exteriores en sexenios anteriores, se suma a quienes alertan sobre los riesgos de que esa propuesta presidencial sea aprobada por la Cámara de Diputados.
Sostuvo, en un evento de Coparmex, que si el Presidente y los tres secretarios de Hacienda que ha tenido insisten en no incrementar un poco la deuda, México tendrá un Gobierno chiquito, ya que con un PIB de 17 por ciento, como el actual,para administrar gastos de salud, infraestructura, educación, agua, seguridad, policía, Guardia Nacional, no podrá hacer muchas cosas, mientras otros países miembros de la OCDE andan en el doble: un 34 por ciento.