Con expedientes que seguramente existen en contra de priistas que fueron gobernadores y hoy son diputados federales y de los que en cualquier momento podría echar mano la Fiscalía General, el Presidente Andrés Manuel López Obrador presiona, por un lado, que la bancada tricolor se divida y vote a favor de su reforma eléctrica para lograr mayoría calificada y, por otro, tundir y debilitar el bloque opositor legislativo PAN-PRI-PRD-MC, que ya anticipó que lo hará en contra.
Después de las críticas y acusaciones que por años le ha hecho a sus antecesores del que fuera su partido de origen y a militantes que ocuparon u ocupan cargos públicos y de elección, ayer instó a los diputados del tricolor a “dar un paso histórico y decidir si seguirán en defensa de la política salinista o retoman ideales de Lázaro Cárdenas y Adolfo López Mateos” a lo que el presidente del PRI, Alejandro Moreno, respondió que su partido “no tiene prisa ni nadie lo presiona”.
DE ESTO Y DE AQUELLO…
Más que el escándalo Pandora Papers, que puso al descubierto que varios miles de exfuncionarios, funcionarios, legisladores actuales y empresarios optaron por irse a paraísos fiscales para resguardar sus fortunas, lo que hoy escala a toda prisa es la discusión que ha originado la iniciativa presidencial de ley eléctrica, por las consecuencias que tendría de ser aprobada como la propone.
Por lo pronto, dirigentes y legisladores de oposición, excepto los del PRI, cerraron filas, rechazan de manera rotunda esa propuesta, advierten que a pesar de directas, abiertas o veladas presiones, advertencias y hasta amenazas, votarán en contra y arremetieron contra sus colegas del tricolor por no oponerse de inmediato a ella.
La entrega de la Medalla Belisario Domínguez, que el Senado otorgará mañana a doña Ifigenia Martínez, será recibida post mortem también por familiares del doctor Manuel Velasco Suárez, eminente neurólogo chiapaneco, fundador del hospital que lleva su nombre.
Ante la negativa del Presidente López Obrador de acudir a esa sesión solemne en la sede senatorial, que atribuye a que la senadora panista Lilly Téllez llamó a “hacerle frente” si llega al recinto legislativo, ésta respondió: “Ni que fuera Layda Sansores o Noroña”.
Los integrantes de la bancada blanquiazul coincidieron en asegurar, y ofrecer, que al Presidente no le faltarán al respeto, pero sostienen que debería escuchar señalamientos de opositores.
Al mismo tiempo, fuera del Congreso de la Unión, la versión que más se escucha es que con esa ausencia, mañana, el Presidente fijará distancia del líder de la bancada morenista, Ricardo Monreal, que insiste en que estará en la boleta en 2024.
Cita Fiscalía a media docena de científicos del Conacyt.