En este espacio le hablamos de la difícil situación que viven cafetaleros de México, específicamente hablamos de caso de Veracruz. El punto medular de esto es el abandono del Gobierno de México, que no proporcionó los apoyos necesarios para continuar con la industria del café de varias generaciones en el país, por lo que hoy se tiene la producción más baja de la historia de México, dejando a otras naciones el jugoso negocio.
Además mencionamos que en el escritorio del Presidente Andrés Manuel López Obrador ya se tenía un documento con las firmas de Angelino Espinoza Mata, del Comité Estatal Sistema Producto Café de Veracruz; de José Julio Espinoza Morales y José Luis Tejeda Colorado, de UNPCAFÉ CNC; Fernando Celis Callejas de la Coordinadora Nacional de Organizaciones Cafetaleras (CNOC); Cirio Ruiz González, del Consejo Regional del Café de Coatepec, A.C., y de Javier Galván Suenaga y Rómulo Melchor Vallejo, de Conaprocafe, solicitando su intervención urgente en el tema y hasta hoy no hay respuesta.
Comentamos que se señalaba a la empresa Nestlé México por gozar de privilegios, de lo cual se defienden diciendo que siempre han mantenido un diálogo abierto y transparente con autoridades y proveedores, en los que enumera caficultores, cuya responsabilidad es fundamental para el crecimiento y fortalecimiento de su negocio. Su deseo, afirman, es que México sea uno de los principales centros productores del grano en la región, lo cual sin duda suena a algo soñado por todos los dedicados a este negocio, pero que en la práctica no ocurre, ni ocurrirá en el corto plazo, justamente por el abandono en que se encuentra el campo mexicano.
Eso sí, la dueña de las marcas Nespresso, Nescafé, Kit Kat, Nesquik, entre otras, está lista para inaugurar la fábrica de café más importante, moderna y sustentable del mundo para la compañía. Presumen que su nuevo centro productor contará con una inversión sin precedente que pone de manifiesto su compromiso con el campo mexicano y con la caficultura del sureste del país.
Hoy mayormente el café que usted consume en el país no es mexicano, y aquí un punto interesante es que Nestlé en México dice que se rige por principios y estándares éticos con el objetivo de ofrecer condiciones comerciales competitivas a nuestros proveedores, estrictamente conforme al mercado. Compra café arábica y robusta proveniente de caficultores de cinco estados del país: Oaxaca, Puebla, Guerrero, Chiapas y Veracruz. En el mundo se sabe que México sufre de crisis de café, por eso aunque esos estados sean proveedores no son suficientes porque hay naciones como Brasil, Colombia, y otras que avanzan enviando grandes toneladas de café a nuestro país que luego es mezclado para ofrecer variedades a precios competitivos, bajos al alcance del gran sector de la población.
La decisión de los cafetaleros no cambiará, no dejarán a un lado su exigencia de piso parejo en el negocio, e insisten en ser escuchados, apoyados y en señalar lo que no se está haciendo bien, y a quienes siguen avanzando en crear un monopolio cafetalero, indefensos ante las multimillonarias inversiones. Nestlé México afirma que seguirá reiterando su apuesta de largo plazo por el crecimiento del campo mexicano, el sureste y los veracruzanos. La urgencia para los campesinos es de tecnología en la que se incluya riego, innovación en semillas, abono, pesticidas, ojalá y les cumplan pero en la Cuarta Transformación esto no es prioridad. Hay que ver cómo avanza el asunto.
Voz en off. La Entidad Mexicana de Acreditación (EMA), presidida por Mario Gorena, firmó un convenio con la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), de la mano del rector Jesús Madueña. Cabe resaltar que esta casa de estudios está a la vanguardia al certificar Sistemas de Gestión de Calidad y en organizaciones educativas conforme a las normas ISO 9001 e ISO 21001. Y con miras a futuro podría acreditar a sus laboratorios de ensayo y calibración, lo que sería muy beneficioso para contar con productos, procesos y servicios técnicamente competentes...