En este momento el recién electo presidente de la Confederación Nacional de Cámaras Industriales, José Abugaber, debe estar sudando frío, con vahídos y palpitaciones arrítmicas pues el Segundo Tribunal Colegiado Administrativo del Primer Circuito, que encabeza el juez Gabriel Regis, negó el amparo que los actuales mandos de la confederación solicitaron para realizar su elección en abierta rebeldía al exhorto que la Secretaría de Economía, a cargo de Tatiana Clouthier, hizo para que se respetara la Ley de Cámaras en los estatutos de esa organización.
En otras palabras, tras el fallo que niega el amparo a la Concamin, de Francisco Cervantes, el nuevo presidente Abugaber queda en un limbo legal que puede terminar en convertirse en abismo. Es de prever que los abogados de Cervantes buscarán llevar a la siguiente instancia el pleito para evitar reformar sus estatutos y mantener el control en los procesos sucesorios; sin embargo, la sentencia en contra del amparo indirecto 1097/2021 es contundente, pues expone que el interés público por un proceso abierto y democrático no puede ser impugnado ni controvertido por Concamin.
Esto, porque no se vulneran sus libertades y garantías constitucionales, puesto que el exhorto de la Secretaría de Economía sólo responde al cumplimiento de la ley hoy vigente y respeto al sentido de justicia que tiene la representatividad democrática.
El exhorto gubernamental sobre Concamin —debe recordarse— proviene del reclamo que la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación, al mando de Enoch Castellanos, realizó a fin de lograr elecciones equitativas y legales que permitieran la participación de todos los empresarios representantes.
Y sí, ciertamente, la actual directiva de la Concamin irá hasta la SCJN, que encabeza Arturo Zaldívar, para preservar una suerte de “Club de Tobi”…, exponiendo innecesariamente a la organización. Vaya, les puedo adelantar que en la LX Legislatura de la Cámara de Diputados, más de uno de sus integrantes ya analiza resucitar la iniciativa del exdiputado Eraclio Ramírez para abrir la libre confederación de cámaras y creación de nuevas representaciones.
Aeromar no paga. Hoy se vence el plazo para que Aeromar, conducida por Danilo Correa, pague el fondo de ahorro para los más de 110 pilotos con los que había pactado tres convenios de reducción salarial para enfrentar los pájaros flacos de la pandemia. También les deben el pago de vales de despensa, prima vacacional y, lo que es peor, se reportan retrasos en las cuotas obrero-patronales al IMSS, de Zoé Robledo, y al Infonavit, dirigido por Carlos Martínez. ¿Podrá Aeromar salir de este adeudo con los trabajadores o llegarán al callejón de los guamazos?
Rubalcava, tercera vuelta. Mañana viernes Adrián Rubalcava empieza su tercer periodo como alcalde de Cuajimalpa (el primer periodo como jefe delegacional), con lo que se convierte en el gobernante decano de la Ciudad de México. La continuidad de su gobierno responde a los buenos y medibles resultados en favor de los habitantes de la demarcación, acumulando experiencia administrativa y social para los complejos problemas de Cuajimalpa y de la capital. No le pierda la pista a este alcalde cuya experiencia es la mas relevante en la respecto a los de alcaldes de Morena y de la UNA-CDMX.
Semarnat atora cruceros. La nota mala es que la Semarnat, de María Luisa Albores, sigue deshojando la margarita para permitir el desarrollo sustentable para la recepción de cruceros en Cozumel, la capital mundial de los majestuosos navíos. La Semarnat, al no liberar la autorización para el nuevo Muelle Cozumel, Terminal de Cruceros, obstruye uno de los proyectos de infraestructura que Andrés Manuel López Obrador propuso para acelerar la recuperación económica posCovid-19. Ya sólo falta Albores de dar su venia, pues ya la dio la dirección de puertos de la Secretaría de Marina, así como la Unidad de Inversiones de la Secretaría de Hacienda. La nueva terminal es proyecto de Muelles del Caribe, empresa mexicana al 100% que apuesta meter 511 mdp a una obra que se ejecutaría con los más altos niveles de protección al entorno marino. Bloquear esa inversión sólo beneficia los muelles de cruceros que en esa isla posee SSA Marine que controla Fernando Chico Pardo.
