No, no será en la Ley de Ingresos y Egresos de la Federación 2023, que este jueves enviará el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, a la Cámara de Diputados, donde serán dados a conocer los incentivos fiscales para atraer a las empresas que busquen instalarse en alguno de los 10 parques industriales del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec; será a través de un decreto presidencial por el cual se establecerán los incentivos en materia de ISR e IVA que los empresarios podrán acreditar a cuenta de reinversión de utilidades, a fin de estimular el crecimiento de operaciones y subsecuente crecimiento de instalaciones, equipamiento y otros activos en el sistema de transporte multimodal y manufactura que coordina Rafael Marín Mollinedo.
Y es que este mes es cuando se programó la obtención de los dos polígonos que faltaban para completar la decena contemplada en el proyecto, razón por la cual Andrés Manuel López Obrador estaría por firmar el decreto que establece el aligeramiento de la carga fiscal a cambio de la reinversión. Si bien el modelo luce proactivo en favor de los inversionistas nacionales e internacionales ligados a las cadenas globales de comercio, pues apoya la expansión de las empresas acorde al ritmo de la demanda, tendría la deficiencia de dejar pendientes estímulos específicos que aumente la liquidez en el capital de riesgo para el desplante de instalaciones que, como es sabido, es el punto crítico de todo proyecto a gran escala.
El decreto de incentivos, por otra parte, tiene la ventaja de no incorporar al Presupuesto Federal ingresos que no tendrá ni las aportaciones que hará en las reinversiones futuras. Las finanzas públicas ya están suficientemente presionadas como para ello. Y también el decreto abre espacio para el mecanismo por el cual el Banco Interamericano de Desarrollo, a cargo de Mauricio Claver-Carone, dirigiría hasta 2,800 millones de dólares para el desarrollo de infraestructura básica de servicios en los parques industriales. Claro, habrá que ver si el gobernador entrante de Oaxaca, Salomón Jara, entiende lo que está en juego.
Yucatán, empleo de la mano de inversión. La semana pasada se comentó en este espacio los montos y razones de por qué la Inversión Extranjera Directa se decanta por instalarse en la entidad que gobierna el panista Mauricio Vila; ahora, el círculo virtuoso de impulsar la inversión tiene como resultado la franca recuperación del número de trabajadores y la calidad del empleo, en niveles superiores a los existentes previos a la pandemia Covid-19. El IMSS reportó que en agosto pasado el número de trabajadores inscritos a sus filas en Yucatán aumentó en términos anuales 6.3%, porcentaje mayor a la media nacional de 4.0%, colocando a la entidad en el sexto lugar con mayor crecimiento de empleo formal a nivel nacional. Vaya, ya suman 16 meses de crecimiento del empleo formal…, a lo que habrá que agregar que, en lo que va de la actual administración, se han generado 36,366 nuevos empleos, colocando a Yucatán en la décima entidad de mayor dinamismo en el indicador central del bienestar social. Y aún faltan por culminar 250 proyectos de inversión por 110 mil millones de pesos que, con seguridad, repercutirán en entorno laboral y social más robusto.
Con la chelas no… ni con los frijoles. Las matemáticas, como evidenció la secretaria de Educación, Leticia Ramírez, no son el fuerte del Cuarta Transformación: López Obrador rompe lanzas contra la producción de cerveza por supuestamente llevarse a exportación el agua que falta en los hogares del país, sin reparar en que esas ventas representan casi 6 mil millones de dólares anuales en divisas que amén de representar 12% de las agroexportaciones, permiten financiar la compra de granos básicos que México, como nunca, ha sido dependiente de las importaciones. Conforme a la medición de autosuficiencia alimentaria que efectúa el Grupo Consultor de Mercados Agrícolas, que dirige Juan Carlos Anaya, el país sólo produce 52% de los granos y oleaginosas que se consumen en el país, pues contrario al discurso oficial, la producción a julio pasado reportó una baja de 0.4%..., y se requieren otras exportaciones para financiar compra de insumos para tortillas, pan y frijoles charros.
Alito… ¿dio el bracito? Sus amigos más allegados se preguntan del cambiazo que el fin de semana dio Alejandro Moreno, ahora a favor de la presencia del Ejército en las labores de seguridad pública. “¿Qué le pasó, que expediente le pusieron en la mesa?” se preguntan sus propias huestes.