El audaz proyecto de construir un corredor logístico que una la costa del Pacífico Norte de México con la costa este de Estados Unidos y Canadá dio ayer su primer paso: Caxxor Group, que dirige Carlos Ortiz. Dio paso a una inversión de 150 millones de dólares para desarrollar el Centro Logístico e Industrial de Durango (CLID), aledaño al aeropuerto internacional de la capital del estado y que genera el punto de referencia comercial y manufacturero para desarrollar el ferrocarril Mazatlán-Durango.
Como aquí les adelantamos, en octubre pasado Caxxor Group fungirá como músculo financiero que canalizará en una primera etapa 3,300 millones de dólares para integrar un Centro Logístico en Winnipeg, Canadá, con un nuevo puerto marítimo en las cercanías de Mazatlán que incluye la construcción y rehabilitación de 254 kilómetros de vías férreas entre la costa sinaloense y las rutas duranguenses para formar el Corredor T-MEC; y esta semana, Ortiz se reunió con el gobernador José Rosas Aispuro para presentar los avances en los estudios económicos y técnicos del trazo ferroviario, así como del desarrollo de la nueva terminal portuaria en el vecino estado de Sinaloa… y también para anunciar la inversión en el nuevo parque industrial de 405 hectáreas, una superficie que el gobierno estatal originalmente desarrolló con el objetivo de atraer a la sudcoreana KIA, que lidera en México Horacio Chávez, pero que hace 6 años optó por Nuevo León.
Un jugador importante en el diseño y evaluación de viabilidad de ese parque industrial es Griver-CICE, que dirige Edgar López, uno de los principales operadores portuarios de México, cuya experiencia en movimiento de carga y comercio le convierte en un aliado clave y eventualmente en uno de los operadores logísticos.
Y en el lado del nuevo puerto industrial que se instalará hacia el norte de Mazatlán, es una patente mexicana de nueva generación que permitirá acelerar la carga-descarga mediante una infraestructura híbrida inland y offshore; ello permite también reducir la inversión en diques de abrigo y operar con energía renovables.
Y todo es inversión privada. La SCT, de Jorge Arganis, sólo tendrá que facilitar los derechos de vía.
Alsea se recupera. La industria restaurantera no podrá olvidar 11 meses de pandemia en que se perdieron 400 mil empleos y más de 100 mil negocios o restaurantes cerrados. Sin embargo, hay señales de recuperación con las aperturas al 30% o al 50% de la capacidad de personas, dependiendo el estado de la República y las medidas que permiten los espacios al aire libre para que los comensales regresen y apoyen a un sector vital para la economía y la socialización: la reducción de contagios y la aplicación de códigos de espacios seguros, por un lado, han sido clave para ello. Otro buen indicador es que uno de los líderes, Alsea, de Alberto Torrado, ya recuperó terreno como lo mostraron sus ventas de último trimestre del 2020, con aumento de 13.5% con respecto al tercer trimestre anterior. A ello se suma la estrategia de expansión con la apertura de alrededor de 50 restaurantes a lo largo del año con que Alsea perfila una recuperación progresiva y segura.
Minu, por más. Una buena noticia para el ecosistema emprendedor en México, Minu, la empresa que ofrece salario on-demand a los colaboradores del país, dirigida por Nima Pourshasb, anunció que levantó una nueva ronda de inversión por 14 millones de dólares para acumular 20 millones de los verdes que destinará a nuevos productos de educación financiera, ahorro, seguros, así como su expansión regional a partir de 2022. Participaron fondos internacionales como Fintech Collective, QED, VEF, XYZ Ventures, Next Billion Ventures, FJ Labs, Mountain Nazca y Village Global que saben de la importancia de generar préstamos de nómina a los trabajadores del sector formal.
