El método usual de las bancadas del Movimiento de Regeneración Nacional en el Senado y en Cámara de Diputados es lanzar iniciativas de ley “para medirle el agua a los camotes”, para “calar” el ánimo social; si son aceptadas, seguir adelante, o detenerlas (acompañadas de heroica teatralidad) sí hay respuesta negativa… como es el caso de la iniciativa que pretende encarecer las medicinas que presentó el senador Ernesto Pérez Astorga.
De manera extraña el legislador por Morena presentó la iniciativa de Ley de Protección a la Innovación Industrial a finales del año y ya se coló hasta la Comisión de Economía que encabeza el panista Gustavo Madero, y básicamente, bajo el pretexto de los acuerdos en propiedad industrial acordados en el TMEC, se proponen tres cláusulas: la Cláusula Bolar de temporalidad, la Cláusula de Vinculación y el Certificado de Protección que alargan indebidamente de 5 a 10 años el monopolio de las patentes. Vaya, el Certificado de Protección, para inhibir investigación y fabricación de genéricos, sería emitido por el IMPI que lleva Juan Lozano.
Un ejemplo práctico de lo que implica esto: sí hoy se descubre un medicamento o vacuna contra el Covid-19, en vez de poderse producir genéricos baratos en 2040, la iniciativa de Morena los autorizaría hasta 2055. Con ello se maximiza el beneficio de multinacionales, eleva el costo de medicinas para los consumidores y el sector público y se obstaculiza a 60 laboratorios nacionales a invertir para fabricar genéricos. La iniciativa de Pérez Astorga tiene un perfil totalmente “neoliberal”.
Pero su pretexto es malo y falso: según la iniciativa se trata de adecuarse al T-MEC, lo cual es una mentira pues gracias a los senadores demócratas se modificó el capítulo de propiedad industrial que extendían protección de patentes que ya había aceptado el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador; y las tres cláusulas resultan notoriamente benéficas para los gigantes integrados en la AMIIF que encabeza Ana Longoria que no desean la competencia.
Pero los genéricos han permitido reducir en hasta 80% precios de medicamentos contra la diabetes, colesterol y triglicéridos elevados, hipertensión, oncológicos, VIH, antibióticos, desórdenes maniaco-depresivos y epilepsia… generando ahorros por 24 mil millones de pesos anuales.
Claro, si Morena quiere desfondar al IMSS, al ISSSTE y al aún desconocido Insabi, encarecer el costo de la salud, puede votar a favor de esa iniciativa.
Los generosos del AICM. Mientras todos los desarrolladores importantes de espacios comerciales y oficinas -así como los grupos aeroportuarios privados- buscan soluciones pactadas con sus arrendatarios para reducir el pago de rentas y con fórmulas que incluyen participación en ventas, así como eventuales cambios contractuales, en el AICM, a cargo de Jesús Rosano, aplican un mecanismo escalonado para el pago de los meses de mayo-junio-julio para agosto-septiembre-octubre. Y todo completito, incluyendo cuotas de mantenimiento y consumo eléctrico. Vaya, de algún lado debe salir el dinero para pagar los 4,200 millones de dólares de Bonos NAIM los próximos 18 años.
CDMX, infraestructura y reactivación. Hoy empieza el primero de tres Foros de la CMIC Ciudad de México, que encabeza Armando Díaz Infante. En ellos participa la Jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum, y el secretario capitalino de Desarrollo Económico, Fadlala Akabani, y se espera presenten un programa de reactivación económica que se separa de la retórica federal: impulsando una ambiciosa agenda de apoyos sociales (28.6 mil millones de pesos), desarrollarán Asociación Público Privadas que canalizarían 76.3 mil millones de pesos en infraestructura urbana sustentable que generaría 990 mil empleos. Ojo.