Tras el incendio de la plataforma petrolera Nohoch–Alfa, el pasado 26 de julio, el director general de Pemex, Octavio Romero Oropeza, abordó, en conferencia de prensa, el polémico asunto de un supuesto megaderrame de más de 400 kilómetros cuadrados en la Sonda de Campeche; los reporteros asistentes preguntaron si la mancha de aceite estaba relacionada con un siniestro acontecido 19 días antes, ante lo cual el director de la petrolera buscó revirar las críticas surgidas por la falta de inversión en mantenimiento como causa de tales eventos y aseveró que se debió a que el contratista –Cotemar– no siguió las reglas de seguridad marcadas por la paraestatal.
Romero explicó que en esa plataforma se realizaban trabajos programados, pero al no seguirse las reglas de seguridad, el contratista no previó que el ducto que iban a redireccionar o modificar debía estar libre de hidrocarburos…, dando a entender que hubo un error humano.
Pero Romero recompuso sus palabras: “No estoy diciendo que la empresa sea la culpable. Porque aquí hay una empresa que le está trabajando a Pemex, Pemex tiene que hacer que la empresa cumpla y la empresa tiene que cumplir. Y hay una investigación que va a arrojar un resultado en donde va a haber responsabilidades. Entonces, puede ser la responsabilidad de un lado o de otro. No estamos culpando a la empresa, no podría, es más, estamos en plena investigación”, identificando, al final, a la compañía como Cotemar.
A petición de Romero Oropeza, un día antes le fue entregado en su despacho un expediente con la orden de trabajo firmada por ambas partes –Pemex y Cotemar–, así como otros documentos del caso: permiso de trabajo, mapa de riesgos, análisis de riesgos, etc., documentos que en Pemex estaban haciendo perdedizos y que son elementos clave en la determinación de las causas y responsabilidades que investiga la Fiscalía General de la República, a cargo de Alejandro Gertz.
Es relevante señalar que el expediente refiere que el ducto de gas al que se iba a dar mantenimiento estaba supuestamente vacío, según los registros del manómetro, y que no se usaba desde 2015.
Sin embargo, los cuerpos rescatados de los trabajadores muertos estaban cubiertos de petróleo proveniente de dicho ducto de gas, el cual conecta a la plataforma Abkatún, y cuya válvula estaba abierta en un ducto supuestamente vacío e inoperante desde 2015.
En la FGR se preguntan quién dejó abierta la válvula y por qué en Pemex le dijeron a su director que no había –o no encontraban– la orden de trabajo de ese día. En la plataforma Abkatún, donde se abrió o dejó abierta la válvula, sólo trabaja personal de Pemex.
Como es sabido, Pemex siempre supervisa los trabajos de sus contratistas, sobre todo en instalaciones que opera y controla la propia petrolera. Tanto Pemex como las empresas que contrata cuentan con estrictos protocolos de seguridad y procedimientos administrativos actualizados para proceder en todos los casos, desde trabajos de rutina hasta en emergencias, pasando obviamente, por mantenimiento… y lo que da inicio a ello, como es la orden y permiso de trabajo.
Almendrita y las fotocopias. Ahora es la adjudicación de un contrato por 1,240 millones de pesos por el servicio administrado de fotocopiado, impresión y digitalización de documentos para el Instituto de Salud y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado en favor de Comercializadora Dopaj, a través de lo que sería la alternación del llamado “contrato marco”…, algo que ya se hizo común al mejor estilo del Año de Hidalgo. El premio, perdón, el contrato, fue asignado por la directora de administración del instituto, Almendra Ortiz, asistida por Juan Carlos El Taquero Suárez Guzmán y Alfredo El Taquerito de la Vega López de la subdirección de Recursos Materiales y Servicios.
En el concurso entraron Black Ecco, Industrias Sandoval, Sistemas y la ganadora, Comercializadora Dopaj. De hecho, quienes vieron de cerca el concurso, señalan que no se respetaron los lineamientos del contrato marco, pues se modificó sustancialmente durante las juntas de aclaraciones, lo cual impidió una evaluación equitativa de las propuestas y favorece a Dopaj, que representa Héctor Cruz.
Y bueno, ya es común en el ISSSTE saltarse los contratos marco establecidos por la Secretaría de Hacienda.
CEMEX, HSBC, compromiso ambiental. El banco global, que aquí dirige Jorge Arce, tiene delineada su estrategia de financiamiento industrial y urbano hacia aquellas actividades y procesos productivos que reduzcan las emisiones de CO2, minimicen el uso de agua y maximicen la limpieza y reúso de la misma, así como la disposición adecuada de residuos sólidos y su reciclaje. En el 2030 será todo un imperativo a nivel mundial para las empresas enfocarse a la sostenibilidad si desean financiamiento accesible y competitivo.
En tanto, Cemex, que dirige Fernando González, actualizó su Marco de Financiamiento Vinculado a la Sostenibilidad para alinearlo con sus metas más ambiciosas de descarbonización para la década próxima, y colaborar el objetivo de la ONU de reducir en 1.5°C la temperatura de la tierra. A través de ese nuevo marco, el área de finanzas, a cargo de Maher Al-Haffar, se guiará para financiarse a fin de acelerar la ruta de Cemex hacia la neutralidad de carbono.
