No es ninguna invención: Vientos del Sur es un proyecto real en el cual Grupo OR-B —desarrolladores entre múltiples obras del Hotel St. Regis de la Ciudad de México— busca construir un canal de navegación entre Coatzacoalcos y Salina Cruz aprovechando los sistemas lagunares de la región, complementando el ecosistema logístico de tren-puertos del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, a cargo de Rafael Marín Mollinedo.
Un grupo de audaces inversionistas privados que lidera el empresario Moisés Araf plantea el proyecto Vientos del Sur que implica dragar varias decenas de kilómetros del río Coatzacoalcos y desembocar a las lagunas de Juchitán de Zaragoza. La Secretaría de Medio Ambiente que encabeza María Luisa Albores se ha mostrado en favor del proyecto a reserva que se cumplan los planes de remediación y mitigación ambiental, además de que la Secretaría de Marina ha dado la anuencia respectiva, nos aseguran.
La creación del canal de navegación va acompañada con un sistema de barcazas que movilicen carga contenerizada y de granel, así como centros logísticos y distribución y dos terminales portuarias fluviales, una en Nanchital y otra en Jesús Carranza. En una primera etapa se estima una inversión de 300 millones de dólares.
Con Vientos del Sur se pretende crear una ruta comercial entre la cuenca del río Misisipi y el Pacífico mexicano que agilice el comercio internacional que hoy —no es secreto alguno— enfrenta cuellos de botella en el Canal de Panamá.
Los gobiernos van y vienen, pero las obras quedan: de lograrse el arranque del Corredor Interoceánico como proyecto de obra pública y que tendrá un importante componente de asociación público-privado para el desarrollo de 10 parques industriales, si el programa de incentivos fiscales anunciado por la secretaria de Economía, Tatiana Clouthier, convence a las empresas a instalarse en tales polígonos, el proyecto Vientos del Sur será una realidad y no un sueño guajiro.
Santa Lucía: ¿dormirá tranquilo el general? Es probable que tenga insomnio el general Isidoro Pastor si se entera que joven controlador aéreo líder de proyecto para operar Santa Lucía, Abraham Velázquez Mancilla, no ha logrado resolver el más importante problema aeronáutico en la terminal que está a 46 días de inauguración: que no podrá tener “operaciones simultáneas” en sus dos pistas ni tampoco en coordinación con el AICM que ahora dirige Carlos Morán.
En 2018 tras presentarse constantemente en la casa de campaña del actual presidente y asegurar que él podría resolver el espacio aéreo del Valle de México aun y con la cancelación del NAIM de Texcoco, Víctor Hernández fue designado director de los Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano. Para ello dio paso a jóvenes talentos para el rediseño de rutas para el aeropuerto capitalino y para Santa Fantasía.
Sin embargo, esos retos no están resueltos. Este 2022 hubo oootra reunión de Seneam con el colegio de pilotos que encabeza Heriberto Salazar, Canaero que preside Luis Noriega e IATA que representa Peter Cerdá, pero sin que se aportaran nuevos datos para resolver interrogantes pendientes.
Pero lo que ya quedó claro para las aerolíneas (y también para arrendadores y aseguradoras de aviones) es que Santa Lucía, por su geoubicación y orografía circundante, no puede realizar operaciones simultáneas: todos los aviones llegan y salen por un mismo “ducto”, por lo que su acercamiento y salida de pistas serán siempre dependientes.
Conalep, en la jugada de Delfina por Edomex. La sustitución del actual director del sistema Conalep, Enrique Herrera Ku, y la entronización en el cargo de Rocío Serrano (perteneciente al equipo de Delfina Gómez y que ocupa la Coordinación de los Órganos Descentralizados de los Centros de Estudios Científicos y Tecnológicos) está ligado a los intereses políticos que la actual titular de la SEP ha empezado a plantear entre sus subalternos: competir nuevamente por el gobierno de Estado de México. El hecho de Delfina tenga que competir contra sus correligionarios Higinio Martínez y Horacio Duarte para ser nominada por Morena en el 2023, hace mas apetecible tener el control sobre centros de capacitación laboral de cientos de miles de jóvenes: cómo aquí se expuso hace una semana, Oscar Flores Jiménez, jefe de la Unidad de Administración y Finanzas de la SEP, ha sido señalado ante el Andrés Manuel López Obrador de “solicitar aportaciones” de entre 100 y 250 mil pesos por periodo escolar a los directores de escuelas de nivel-medio superior… mismas que se obtienen de cuotas en efectivo e irregulares que se le solicitan a los alumnos. Haga sus cuentas.
