Desde el fin de semana pasado, nos comentan, un pragmático Rubén Moreira, próximo coordinador del PRI en la Cámara de Diputados, comenzó a lanzar guiños a Ignacio Mier Velazco, quien repetirá como líder de la bancada de Morena. ¿Y por qué se tiene esa percepción? Ah, pues porque el legislador tricolor, nos aseguran, ha mostrado su disposición a discutir y votar la ley secundaria de la revocación de mandato, asunto que se le atoró a la 4T frente a la oposición. Un guiño más es su apertura a concretar una reforma electoral, al subrayar que hay un punto de coincidencia con los guindas para evitar que los consejeros electorales traten de asumir funciones legislativas. Aunque nos señalan que eventuales acuerdos se verían reflejados a partir de septiembre, con un grupo parlamentario tricolor ubicado en algunas comisiones de peso de la Cámara de Diputados, posiciones en los órganos de gobierno y voz en el reparto del presupuesto 2022, ya algunos legisladores a los que se les da la suspicacia alistan la pregunta que harán al PRI en ese momento: ¿Y la alianza? ¿Y Alejandro Moreno?
• Germán Martínez pinta su raya
Y fue el senador Ricardo Monreal quien ayer se refirió a su continuidad al frente del grupo parlamentario de Morena en el Senado de la República. “Sí, claro me mantengo, si los compañeros lo deciden me mantendré, y si no, que revoquen mi mandato”, señaló, en medio de versiones sobre supuestos pulsos que se estarían haciendo al interior del grupo parlamentario. Sin embargo, ayer mismo destacó la voz de Germán Martínez, quien refrendó su reconocimiento al trabajo del zacatecano y además marcó su raya respecto a operadores políticos emergentes en materia legislativa. “Nosotros somos otro poder, hay otros tiempos legislativos… No cuentan conmigo si son instrucciones que vienen de afuera del Senado. Eso de la soberbia de no moverle nada, aquí no prospera; aquí prospera el diálogo. Yo no recibo trato de empleado, como senador de la República”. Claramente pidió que su mensaje se entienda en la Secretaría de Gobernación y en Palacio. Uf.
• CDMX y el feminicidio
En medio del debate sobre la efectividad de algunas políticas públicas para hacer frente al problema de la violencia contra las mujeres, el que dio ayer buenas cuentas fue el gobierno de la CDMX, a cargo de Claudia Sheinbaum, y en particular la Fiscalía capitalina, al frente de la cual está Ernestina Godoy. Y es que, durante los primeros siete meses, según reportó esta última, ha habido una reducción de los feminicidios de 24 por ciento. Dato relevante al cual se agrega el de que han sido detenidos 53 presuntos feminicidas y homicidas de mujeres, un aumento de 121 por ciento. La propia Godoy destacó la relevancia de la Alerta por Violencia contra las Mujeres, medida que se encuentra bajo la revisión de agrupaciones que realizan trabajo en favor de las mujeres y refirió que dicha política va más allá de las medidas específicas que plantea, porque además convoca a los servidores públicos y a la sociedad civil a construir nuevas y mejores instituciones.
• Pandemia: defunciones al alza
Apenas el martes pasado durante su participación en el llamado martes de la salud, el subsecretario Hugo López-Gatell daba cuenta de “signos de reducción” de la pandemia. Se refería a indicadores de casos estimados, de hospitalizaciones y de positividad (en pruebas aplicadas). También mencionó, nos recuerdan, que “la mortalidad también empieza a mostrar signos de reducción”, aunque no dio más datos. Ese mismo día cuestionó que medios plantearan “versiones limitadas de lo que ocurre”. Lo anterior viene a cuento porque ayer se registró la cifra más grande de defunciones para un día en la tercera ola: un total de 986. De acuerdo con algunas mediciones de mayor alcance, nuestro país sería ayer el tercero con más muertes en el último día. La cifra de fallecimientos que lleva la Secretaría de Salud, a cargo de Jorge Alcocer, se ubicó ya en 255 mil 452. La pandemia no ha cedido, nos comentan.
• El “mal regreso” de la CNTE
Con la novedad de que la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, otrora aliada del proyecto político que llegó al poder en el 2018 y hoy es gobierno, ya habló. ¿Y qué fue lo que dijo? Pues que no. Que no regresará a las aulas en las entidades en las que tiene presencia, es decir, Ciudad de México, Guerrero, Chiapas y Oaxaca. ¿Y ahora por qué? Ah, pues porque afirma que no hay condiciones para un retorno seguro, planteamiento que sustenta en una encuesta que ésta misma realizó a 60 mil padres de familia, de los cuales un 90 por ciento expresó que ve riesgo de contagio. Así que los profesores a quienes les cumplieron la promesa de tumbar la “mal-llamada” reforma educativa, ahora aplicarán lo que podría denominarse el “mal-regreso”, porque es un hecho que ellos seguirán con la modalidad a distancia. Sí. Distancia de las escuelas y de la 4T.
• Un polémico extra que prende alarmas
Ahora que la agonizante primera legislatura del Congreso de la Ciudad de México afina un periodo extraordinario para cerrar sus trabajos, nos cuentan que esto no tiene nada contentos a los integrantes de la Unión de Alcaldías capitalinas, que agrupa a alcaldes electos de oposición, ya que desde su punto de vista muchas de las reformas que se abordarán les quitarán autonomía y temen que los diputados dejen todo planchado para que la Jefatura de Gobierno les reste poder. Por eso ya convocaron a las dirigencias de los partidos opositores a sumar fuerzas para tirar la sesión extra, aunque lo más probable, nos dicen, es que su ofensiva no haga mella en la aplanadora morenista. Pendientes.