No quieren recibir documentación
Y fue ayer en las instalaciones del Centro Prodh, donde, nos cuentan, de plano les cerraron la puerta en la nariz a funcionarios de la Comisión de la Verdad del Caso Ayotzinapa de la Secretaría de Gobernación. Su intención era entregar a los padres de los 43 normalistas desaparecidos en Iguala una carta del Presidente, además de correspondencia de éste con el primer ministro de Israel y con el secretario de la Defensa Nacional. Fue alrededor de las seis de la tarde que llegaron al sitio a entregar también una caja que contenía cinco tomos que conforman el tercer informe de la CoVAJ. Inquietó que no fuera recibida la documentación porque, nos hacen ver, este hecho daría cuenta de que alguno de los abogados no quiere que los padres se enteren de los avances de la investigación. Todo esto ocurre cuando Vidulfo Rosales ha dado a conocer que las autoridades recién encontraron restos óseos en el basurero de Cocula. Ahí el dato.
Y no fue por “exceso de pago”, como con humor algunos morosos solían argumentar el corte de algún servicio doméstico. Y es que resulta que ayer a la Secretaría de Gobernación le cortaron los servicios de datos. Y todo porque dejaron de pagarlos nada menos y nada más que ocho meses, con lo cual acumularon un adeudo de 63 millones 730 mil pesos, sin considerar intereses y actualizaciones. Ayer se conoció un documento enviado por la empresa Triara al área de administración y finanzas de la dependencia donde despacha Luisa María Alcalde, en el que se señala que el retraso en los pagos “nos ha generado enormes afectaciones con el personal de soporte 7x24, proveedores tecnológicos y aliados nacionales e internacionales”. Y notifica de la aplicación del protocolo de suspensión progresiva de sus servicios. ¿No estaría bien que la futura presidenta de Morena cerrara la cuenta en ceros a quien la sucederá?, se preguntan en el futuro equipo de gobierno.
IMSS-Bienestar: Legado de la 4T
Y fue en ayer en Palacio Nacional donde Zoé Robledo, director general del IMSS, destacó la gran hazaña que representa el IMSS-Bienestar, y que quedará como legado del gobierno del Presidente López Obrador. Algunos de los indicadores que esta institución arroja son los siguientes: brinda atención médica gratuita a 53.2 millones de personas sin seguridad social en 23 estados; desde su implementación en octubre de 2023 pasó de 80 a 660 hospitales y de 3 mil 622 Unidades Médicas Rurales a 11 mil 935 Centros de Salud, con una plantilla laboral de 274 mil 977 trabajadores. Ayer, además, en enlaces remotos a la mañanera, mandatarios de nueve entidades inauguraron unidades médicas y hospitales. Está claro que el IMSS-Bienestar, con Robledo al frente, pudo encaminarse y acelerar y ha quedado establecido como política relevante de la 4T. Por lo pronto, López Obrador reconoció a Zoé por quedarse en su puesto en lugar de aspirar a la gubernatura de Chiapas y celebró su ratificación por parte de Claudia Sheinbaum para continuar con el avance del IMSS-Bienestar. Ahí el dato.
Y el que está que no cabe de contento es Miguel Ángel Yunes Márquez, el legislador que dio el voto que faltaba a la mayoría cuatroteísta en la Cámara alta para que se aprobara la controversial reforma al Poder Judicial. Y es que resulta que ayer se dio a conocer que le ha sido concedido ser secretario de una comisión importante en el Senado. Éste ya confirmó que efectivamente ocupará una posición que según los acuerdos de reparto debía ocupar un morenista —aunque él sostiene que aún no lo es—. Y no pasó mucho de que se conociera el anuncio que en las redes se diera una oleada de señalamientos que acusan que no es otra cosa que un reflejo del voto con el que se completó la mayoría calificada en la referida reforma constitucional. Para muchos también ha resultado de mal gusto que de ser señalado por temas pendientes con la justicia morenista en Veracruz, ahora quede como secretario de la Comisión de Justicia. Por cierto que, nos comentan, el presidente de la misma será otro al que estuvieron a punto de detener también por pendientes con la ley: Javier Corral. Uf.
Y el que no se quería ir sin dejar sembrada su última polémica es el director de Materiales Educativos de la Secretaría de Educación Pública, Marx Arriaga. Y es que resulta que el funcionario, artífice de los polémicos libros de texto, llamó a los maestros a no someterse a la evaluación diagnóstica que realiza la Comisión Nacional para la Mejora Continua conocida como Mejoredu. “¡Magisterio, resistan! En todo el país, en contra de la Nueva Escuela Mexicana, se obliga a los docentes al desarrollo de la Evaluación Diagnóstica de Mejoredu. ¡Resistan! No permitan que la NEM se convierta en un producto. Recuerden, ese ejercicio neoliberal de Mejoredu es ¡voluntario!”, fue el mensaje que publicó en las benditas redes el lunes pasado. Y ayer agregó otro, luego de que se le vinieran encima cuestionamientos por frenar una prueba con la que la propia SEP se ayuda a mejorar. “Algún incauto creería que Mejoredu las diseñó para ayudar al SEN. Convencernos de que no es ‘capital Humano’ sino que formamos ‘talento Humano’”, sostuvo. ¿Será que Marx así se despide o anda buscando continuar? Pendientes.
Cuatro horas votando por jueces
Además de entretenido, nos comentan, el simulacro de elección de jueces que llevó ayer a cabo el coordinador del PRI en la Cámara de Diputados, Rubén Moreira, ha resultado esclarecedor de lo complejo que resultará elegir a los jueces, ministros y magistrados. El ejercicio permitió ver cómo sería elegir a 648 juzgadores de entre más de cuatro mil candidatos. Los participantes tenían que llevar 25 boletas y depositarlas en la misma cantidad de urnas, pero se enfrentaron a varias complejidades, por ejemplo, la de anotar cada uno de los nombres de los jueces, pues se tiene previsto que cada elector apunte el nombre del candidato de su preferencia. Sólo para el caso de los ministros hay que anotar nueve nombres de una lista de 81 posibilidades. De acuerdo con el diputado, los “electores” se tardaron cuatro horas, tiempo que pasaron de pie en las mamparas: un mecanismo inoperante. “Se los digo a mis compañeras y compañeros de Morena: ustedes pusieron en la Constitución cosas tan específicas que no lo van a poder arreglar en las leyes secundarias”, alertó el priista.