Ana Nájera, la creadora del concepto, durante su adolescencia desarrolló Trastorno de Conducta Alimentaria (TCA), mismo que pudo superar gracias al apoyo de sus padres, tanto de manera económica como emocional.
Durante el proceso de rehabilitación, Ana aprendió que conocer las emociones y procesarlas de manera correcta hace la diferencia en el manejo de trastornos mentales y de adicciones y que en México este tipo de apoyo, acompañamiento e información en temas de salud mental es insuficiente. Es así como nace “Esencia”, un lugar donde niñas, niños y sus familias pueden tener acceso a herramientas para trabajar en la salud emocional.
Para Ana, la salud emocional es lo más importante, ya que el trabajo interno es primordial para lograr paso a paso un mejor mundo exterior. En palabras de la creadora, Esencia es el Kumon (un método de estudio personalizado que promueve el desarrollo de habilidades para lograr el máximo potencial) en este caso de las emociones. Dicho trabajo se realiza a través de cinco ejes fundamentales: mente, corazón, espíritu, cuerpo y planeta.
Cuáles son las enfermedades más comunes de invierno y quiénes deben vacunarse
Esencia es un emprendimiento que busca dar herramientas a poblaciones vulnerables, sobre todo a niños y adolescentes, para que identifiquen cuando están en una situación de riesgo (en lugares o situaciones de violencia) y puedan tener un acompañamiento para regularizar sus emociones y así evitar que desarrollen otro tipo de trastornos.
El apoyo que reciben los usuarios es integral, pues los padres, tutores o cuidadores primarios también reciben apoyo para desempeñar de la mejor manera su rol de acompañamiento en el proceso de rehabilitación.
Hoy más que nunca sabemos lo importante que es la salud mental, por lo que promover emprendimientos que busquen dar acceso a ella en poblaciones vulnerables, es primordial, razón por la cual en Victoria147, Ana Nájera recibe apoyo mediante el programa Validación, para que Esencia logre llegar a ser el sistema de regularización emocional que los niños y adolescentes de México reciban.
Contemos más historias que inspiran.
