Hace cuatro años el COVID-19 paralizó al mundo entero, millones de personas murieron a causa de la enfermedad causada por el virus SARS-CoV-2. Mientras los confinamientos se hicieron obligatorios, los científicos trabajaron a marchas forzadas para encontrar vacunas y frenar la pandemia, una de las primeras en salir fue la del laboratorio AstraZeneca, en torno a ella surgieron varias teorías, una dellas la misma empresa acaba de confirmarla: puede causar trombosis.
Y es que para muchas personas eso era solo parte de las teorías conspirativas que surgieron a raíz de la pandemia, sin embargo, familias británicas demandaron a la farmacéutica luego de que algunos miembros presentaran problemas de salud o incluso la muerte y se asociara al biológico recibido para inmunizarse contra el COVID-19.
Tras la demanda colectiva del gigante británico, AstraZeneca reconoció por primera vez que su vacuna sí puede causar TTS, siglas con las que se identifica al Síndrome de Trombosis con Trombocitopenia, aunque apuntó que es en “raras” ocasiones, según afirmaron medios británicos que citaron documentos judiciales de Reino Unido.
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De acuerdo con el medio británico Daily Mail,e l TTS es una afección médica en la que una persona sufre coágulos de sangre además de un recuento bajo de plaquetas, componente sanguíneo que ayuda a la sangre a coagular.
El posible efecto secundario de la vacuna, anteriormente era denominado como trombocitopenia trombótica inmunitaria inducida por la vacuna, destaca el medio. El reconocimiento por parte de AstraZeneca podría dar lugar a pagos caso por caso.
En las notas de prensa, los abogados representantes de los demandantes indican que algunos casos podrían valer hasta 20 millones de libras esterlinas en compensación.
The Telegraph por su parte, indicó que el primer caso fue presentado el año pasado por Jamie Scott, padre de dos hijos, que quedó con una lesión cerebral permanente tras desarrollar un coágulo de sangre y una hemorragia en el cerebro, tras recibir la vacuna en abril de 2021.
Dicho medio indica que pese a que AstraZeneca ha rechazado las demandas, sí reconoció el “raro” efecto secundario de su biológico.