Elizabeth Parrish es biológicamente 20 años más joven después de someterse a la primera terapia genética contra el envejecimiento humano.
La empresa desarrolladora es BioViva, de donde Parrish, es presidenta ejecutiva (CEO), convirtiéndose en la primera mujer en rejuvenecer mediante un proceso genético.
¿De qué trata la terapia?
La terapia se basa en la medición del largo de los telómeros, estructuras que protegen los extremos de los cromosomas y que se van acortando conforme el organismo envejece.
La aplicación de este proceso inició en septiembre de 2015, cuando la presidenta ejecutiva, de 44 años de edad, recibió dos terapias genéticas experimentales desarrolladas por la empresa.
La primera de protección contra la pérdida de masa muscular debido a la edad, y la segunda dirigida al combate de la pérdida celular que lleva a enfermedades relacionadas con el envejecimiento.
Dato
Según la Organización Mundial de la Salud, entre el año 2000 y 2050, la proporción de los habitantes del planeta mayores de 60 años se duplicará, pasando del 11% al 22%.
Se pronostica que de aquí al año 2050 la cantidad de ancianos que no pueden valerse por sí mismos se multiplicará por cuatro en los países en desarrollo.
Después de la aplicación de los dos procesos, se midió el largo de los telómeros de células de glóbulos blancos tipo T-lymphocytes y se comparó con el promedio de largo de esas estructuras entre la población estadunidense de la misma edad.
El año pasado, la misma medición encontró que los telómeros se habían alargado en lo correspondiente a unos 20 años.
Biovida reveló que mantendrá en observación a su CEO por los años siguientes, además de que ensayará nuevas terapias genéticas y las combinará con otras orientadas a la restauración de daños originados por el envejecimiento.