Sebastián Zertuche, Pablo Ramírez, Erick Bustos y Germán Rodríguez, de Altamira, Tamaulipas, tienen entre 11 y 12 años de edad. Ganaron el pase a una competencia mundial de robótica, pero no contaban con los recursos para poder asistir, hasta que una empresa decidió ayudarlos.
Gracias a una nota publicada hace días en EL UNIVERSAL, donde los cuatro niños pedían ayuda económica para ir al torneo que será del 29 de abril al 1 de mayo en Louisville, Kentuchy, Estados Unidos, la empresa Seguritech, los contactó para apoyarlos con hospedaje en hotel y boletos de avión de ida y vuelta.
Grupo Seguritech apoya constantemente a la educación y desarrollo de jóvenes de México.
En dos ocasiones anteriores, esta empresa ayudó económicamente a otros dos jóvenes, uno que fue a la NASA y otro que también participó en un torneo de robótica.
Los niños tamaulipecos estudian en escuelas diferentes en Altamira y Tampico, pero asisten a clases de robótica en el “Robotik World Center”. Obtuvieron el pase a la Competencia Mundial de VEX Robotics World Championship 2018, es un Torneo Nacional de Robótica que organizó la Universidad Tecnológica de León, compitieron en la categoría VEX IQ Elementary School, otorgándoles el Premio de Excelencia.
Sebastián, Pablo, Erick y Germán, estaban recaudando fondos con la ayuda de sus familiares, pero ahora se encuentran muy agradecidos con la empresa por brindarles apoyo económico.
Grupo Seguritech apoya constantemente a la educación y desarrollo de jóvenes de México.
Soraya Vázquez, Directora de la academia Robotik, nos compartió vía telefónica, como fue que los contactaron para ayudarlos a cumplir su sueño: “cuando ustedes publicaron la noticia, al día siguiente nos estuvieron hablando varias veces, tenían interés en ayudarnos”, dice.
También mencionó que los padres de los niños estaban pensando pedir un préstamo a un banco para cubrir los gastos del viaje: “me dijeron que no les diera la noticia a los padres hasta que se haya confirmado, me estaba aguantando para decirles”.
A ella le autorizaron el 11 de abril: “no pude evitar llorar cuando les dije a los padres, ellos están muy agradecidos y emocionados”, dice.
Los niños practican todos los días tres horas diarias, se preparan cada día para mejorar sus habilidades en robótica. Ahora se tienen que concentrar en ganar y aprender de esa nueva experiencia en el torneo mundial.
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