Las películas animadas de Disney con las que crecieron los niños de los años 90, volvieron a las salas de cine en remakes que sustituyeron la animación por personajes interpretados por actores de carne y hueso.
Desde el 2010, los cineastas se han apuntado para hacer una versión live-action de los clásicos animados, una fórmula que han repetido en muchas ocasiones debido a las redituables ganancias que han dejado los remakes.
En los años 90 éstas cintas como El Rey León, Aladdin o La Bella y la Bestia se apoderaron de las taquillas, sin embargo, más de 20 años después las ganancias de los live-action sobrepasaron a las primeras.
Este 2019 se estrenaron distintas cintas del recuerdo, una de éstas fue El Rey León, que originalmente se estrenó en junio de 1994, regresó a la pantalla bajo la dirección de Jon Favreau con una técnica digital que utiliza la fotografía para lograr un efecto hiperrealista.
En 1994 la cinta protagonizada por el león Simba logró recaudar 441 millones de dólares, sin embargo, en 2011 se reestreno una versión en 3D y en conjunto su recaudación total desde 1994 hasta esa fecha fue de 968 millones de dólares.
Pero el filme de Jon Favreau logró superar la cifra y logró recolectar 1,014 millones de dólares a nivel internacional, de acuerdo con un comunicado que dio a conocer Disney.
Otra de las películas que llegó a las pantallas este año fue Aladdin, que causó gran expectativa porque el genio de lámpara fue interpretado por Will Smith. La cinta logró una cantidad de 1,051 millones de dólares, con la que superó lo que juntó el filme original de 1992, ya que éste logró 504.1 millones de dólares.
En 2017, La Bella y la Bestia fue la apuesta de Disney para rehacer el largometraje, el cual fue protagonizado por la conocida actriz Emma Watson, en ese año el filme recaudó recaudó 1,263 millones de dólares, con lo que dominó la taquilla y superó a Rápidos y furiosos que juntó 1, 235 millones. Mientras que en 1991 cuando se estrenó la cinta animada ésta no consiguió ni la mitad de lo que la versión live-action, pues sólo recolectó 425 millones.
El éxito de estas cintas, de acuerdo con el escritor Daniel Herrera, es porque hacen uso del elemento de la nostalgia. En su artículo “La nostalgia como moda”, que publicó en El Cultural, suplemento de La Razón, señala que la televisión y el cine entregan un producto tras otro para revisar el pasado, “cuando el dolor no existía”.
“La explotación del fenómeno de la nostalgia parece invadir todo. Tenía que suceder, somos la generación que ya no vivió el mejor momento del capitalismo: para nosotros no hubo estado de bienestar, pero sí hay consumo cultural a lo bestia”, afirma el autor.
Disney se ha encargado de explotar muy bien la nostalgia con sus propias producciones, una de las primeras que causó gran furor entre el público fue Alicia en el país de las maravillas, no sólo porque revivió una cinta que es mucho más antigua y que también recuerdan los jóvenes de los 90, sino porque el creador de la nueva cinta sería el aclamado director Tim Burton.
El Libro de la selva también trajo ganancias millonarias. Se estrenó en 2016 la nueva versión y logró 966. 6 millones de dólares. En 1967 tan sólo consiguió 378 millones de dólares.
Pero no todo fue alegría, felicidad y mucho dinero para Disney, tuvo un tropiezo y fue con el remake de Dumbo, y aunque contó con Danny DeVito en el elenco y con Tim Burton en la dirección, no tuvo los resultados gloriosos como las cintas mencionadas.
Dumbo logró 353.3 millones y aún así superó la versión animada de 1941, la cual sólo consiguió 1.3 millones de dólares.
Este pequeño desliz por el que pasó Disney, fue sólo eso un desliz pequeño, pues ya está echando todo el armamento para los próximos años, pues ya está preparando las películas de Mulán, La Sirenita y La Dama y el Vagabundo, la cual ya se estrenó, pero sólo se puede ver a través de la plataforma de streaming de Disney+.
