Amanda Gryce es una joven de 22 años que confiesa que vive “un infierno” por una rara afección conocida como Síndrome de excitación sexual persistente oPSAS, la cual le provoca hasta 50 orgasmos en un día tan sólo por realizar sus actividades cotidianas.
“No es placentero. Se podría decir que se ha convertido en una tortura. Esta condición controla tu vida por completo y es como vivir dentro de una pesadilla. Puedo tener 50 orgasmos en un día y entre cinco y diez en una sola hora”, señala la joven que vive en Florida.
Amanda Gryce cuenta que desde que tiene ocho años comenzaron a llegarle estos orgasmos, los cuales pueden ocurrirle en cualquier lugar, desde una reunión con amigos o en su trabajo.
“Me Sucede cuando estoy con mis amigos o en público y es muy vergonzoso. Me mata por dentro. Solo me queda sonreír y fingir que no pasa nada", declaró a “The Sun”.
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La joven comenta que aunque se supone que los orgasmos son un buen sentimiento para ella ya no lo son pues los ha sentido por muchos años todos los días, incluso llegó a pensar en quitarse la vida, tal y como hizo el año pasado, Gretchen Molannen, de 39 años, una mujer de Florida que llevaba luchando contra esta afección durante 16 años.
Por suerte, Gryce descubrió recientemente que puede aliviar los síntomas a través de ejercicios de meditación y relajación. “Hay cosas que puedo hacer para reducir la cantidad de orgasmos, a pesar de que todavía son constantes ... Tomar el control del trastorno en lugar de tratar de controlarlo es un sueño hecho realidad”, explica.
KR
