Theo, un enorme perro Gran Pirineo proveniente de Sylvania, Ohio, sorprendió a su paseador al sostener entre sus dientes un cuchillo y no querer soltarlo por más que el humano le dijera.
"Pensé que había agarrado un palo como de costumbre", dijo Matt Paprocki, quien estaba paseando al perro de su amiga por segunda vez ese día.
El paseo iba bien hasta que el perro "metió la cara en una pila de palos y ramas", donde se encontró con el afilado cuchillo. "Mi ojo captó el brillo del metal, y fue pánico instantáneo", comenta Matt.
Aunque se tensó, el hombre le ordenó al lomito que soltara el arma: "Theo, suelta el cuchillo". Sin embargo, el perro no hizo caso y siguió sosteniendo el cuchillo con sus dientes, además de una mirada penetrante.
Poco después, Matt, quien señaló que los Grandes Pirineos son conocidos por no revelar sus hallazgos, recurrió a la negociación. "Necesitan intercambios por algo de mayor valor para ellos. Traté de cambiarlo por galletas de animales, que siempre llevo conmigo".
"No funcionó. Probé un buen palo. No funcionó. Mi preocupación era que iba a saltar y jugar con el cuchillo". A medida que el pánico aumentaba, Paprocki tomó un video del armado y peligroso Theo, para luego enviarlo a la dueña.
"Tengo 42 años. He tenido perros toda mi vida. De alguna manera, no estaba preparado para este momento", señaló Paprocki en el video que posteó en Twitter. Afortunadamente, la propietaria entró en acción.
"Ella lo vió, llegó a los pocos minutos y corrió a su casa para conseguir comida para intercambiar. La crema batida no funcionó. El salmón lo hizo. Theo dejó caer el cuchillo y ella lo agarró", dijo. "Ahora nos reímos de eso. Un poquito".