Enfermera que laboraba en una sala Covid en el Hospital Heartlands robó la tarjeta bancaria de paciente que tenía minutos de haber fallecido, para comprar frituras, dulces y refrescos.
La víctima, de 83 años de edad, perdió la batalla contra el coronavirus el pasado 24 de enero del año en curso, sin embargo en días recientes su caso fue retomado por medios internacionales.
Ayesha Basharat, protagonista del polémico caso que ha causado revuelo en redes sociales, justifica su acción argumentando que “confundió” la tarjeta con una de su propiedad.
Un médico registró la hora del deceso de la víctima a las 1.56 p.m., pero solo 17 minutos después, la joven usó el 'plástico' para realizar seis compras.
Al ser detenida por las autoridades inglesas admitió el robo y fue acreedora a dos condenas de cárcel de cinco meses.
“Esto fue un abuso de confianza abominable y angustioso para la familia de la víctima”, dice Andrew Snowdon, oficial investigador del Departamento de Investigación Criminal de Inglaterra.
