Utilizar cubrebocas en espacios cerrados no ha perdido importancia, al contrario, tras la llegada de la variante Ómicron no debemos de bajar la guardia, sin embargo una mujer llevó el uso de la mascarilla a otro nivel.
Personal de una heladería le pidió a la joven colocarse su cubrebocas, ya que no lo traía puesto, pero como no tenía optó por quitarse su vestido para cubrir su nariz y boca.
A la mujer no le importó terminar en ropa interior con tal de conseguir entrar a la tienda de helados.
Ante el asombro de una familia que se encontraba en la heladería, el personal del establecimiento volvió a solicitarle a la joven que se retirara.
De acuerdo a medios locales al final la mujer se salió con la suya y consiguió que le vendieran los helados que buscaba.
Los hechos tuvieron lugar en el Barrio Trapiche de la localidad de Godoy Cruz, Argentina, y fueron captados en video gracias a las cámaras de seguridad.
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