Ondeador de banderas, paseador de patos y más... Conoce los cinco trabajos más raros del mundo

Cuando hablamos de trabajo (procuramos hacerlo lo menos, para no estresarnos) siempre mencionamos aquellos que de plano de a poco se han ido extinguiendo o también nos preguntamos si hay alguno para el que somos capaces, pero aún no se ha inventado. 

Alrededor del mundo, hay trabajos que son considerados de lo más normales, sin embargo, para nosotros no son tan simples e incluso hasta nos parecerían ridículos. ¿Quieres saber cuáles son esos trabajos considerados los más raros en el universo? Aquí por lo menos te presentamos cinco, ya dinos tú si te interesaría en algún momento, aplicar para alguno.

Testeador de olores

Para este trabajo lo que necesitas hacer es... oler axilas, o como decimos coloquialmente, sobacos. Para que tu desodorante llegara a oler bien, hubo gente que se dedicó a oler esa parte de tu cuerpo, para saber lo efectivos que son los productos de limpieza que son elaborados por las empresas cosméticas. 

Ondeador de banderas

En India, en el hotel Rambagh Palace de Jaipur, contrataron a un hombre para que ondee una bandera a sus clientes. ¿Con qué objetivo? Alejar a los pájaros que acuden a beber de la fuente principal del lugar y molestar lo menos posible a los huéspedes de este hotel. 

Balanceador de dados

Este trabajo es sumamente importante en los casinos de Las Vegas, pues se contratan para que comprueben que ningún dado ha sido trucado. La contratación corre a cargo del propio casino, del mismo fabricante de los dados o de la autoridad encargada de vigilar las apuestas en estos lugares.

Paseador de patos

En un complejo hotelero ubicado en Memphis, en Estados Unidos, se dio a conocer que durante 50 años, un hombre fue contratado para pasear a los patitos que formaban parte de las atracciones del lugar. Los tenía que acompañar para que tomaran agua de la fuente principal, en donde también se bañaban a la vista de los huéspedes. 

Deshollinador

Cualquier problema relacionado con la ventilación en Berlín, lo debe ver un deshollinador. Norbert Skrobek es considerado el mejor en aquellas tierras alemanas y aunque no lo creas, hay especialidades técnicas para ser un gran profesional de esta actividad laboral.