Ante la temporada decembrina, los perros también sienten frío, sobre todo los que son pequeños, viejos y cuentan con poco pelo. Para evitar que se enfermen, existen algunas señales que te ayudarán a conocer si tu lomito busca calor.
Tocar las orejas de tu peludo amigo será necesario, pues si están frías es un indicador de que necesitan entrar en calor, ya sea acercándolo al cuerpo o en casa.
Si duerme más tiempo de lo normal o permanece acurrucado con su cola entre las patas, es una acción automática para tratar de entrar en calor porque tiene frío. Es por ello que los especialistas sugieren ponerle un suéter o ropa especial para ayudarlo a regular su temperatura.
Otro síntoma que puede presentar tu cachorro son los temblores; generalmente se confunden con nervios o estrés cuando el animal está bajo mucha ansiedad o miedo.
Al acariciarlo también se detecta, ya que se puede sentir si los músculos están rígidos, pues estos se contraen porque las bajas temperaturas de su cuerpo tensa los tejidos y provoca la contracción muscular.
A los perros se les reseca la piel con el frío, sobre todo durante el otoño y el invierno. Es por ello que se recomienda revisar constantemente el estado de salud de tu perrito. Lo mejor es acudir con el veterinario para evitar que se desarrolle picazón, la cual deriva generalmente en infecciones.
MAEP
