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Andar conmigo

ARQUETIPO FUTBOL 

Daniel Alonso
*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
Por:

Con drama, goles in extremis, tarjetas rojas y el llanto por la alegría o por la frustración, concluyeron la fase de cuartos de final. Las cuatro series al menos en algún momento tuvieron su dosis de sabor Liguilla MX. La situación más angustiante la vivieron los aficionados de Toluca y Chivas con el gol anulado a Alexis Vega en el minuto 79 y que significaba la eliminación del cuadro tapatío. Tres minutos de agonía después en lo que se determinaba si existía fuera de lugar. Y si alguien festejó ese gol anulado fue Javier Hernández que se comió un gol que ni un amateur falla minutos antes.

La felicidad del Rebaño podría ser redonda el próximo fin de semana, porque en el camino a la final está el acérrimo rival, el América. El club de Coapa también vivió dramatismo en su serie ante su actual pesadilla, los Tuzos del Pachuca. En el primer tiempo, la jugada de la polémica la vivió Jonathan dos Santos, que en una fuerte jugada, le costó la amarilla. Dicha entrada fue revisada por el VAR, lo que generó temor, porque quedarse con 10 ante la dinámica de los Tuzos era simplemente la eliminación; pero todo quedó en amonestación, y con el sello que caracteriza al americanismo, ya en el minuto 94, Julián Quiñones apareció en un rebote y empató la serie con lo que el América se metió a semifinales.

El primer duelo de esta saga que llegará a cinco enfrentamientos en lo que va del año será mañana en el AKRON. Clave para el Guadalajara sacar ventaja, la que sea, para que en el Azteca se vivan 90 minutos más de locura. Por su parte, el América luce cada vez más frágil, probablemente por cansancio, pero un clásico es la mejor fórmula para una bocanada más, en busca del bicampeonato. ¿Final adelantada?

La otra semifinal la conforman dos clubes que sufrieron en menor medida, pero de todos hubo minutos angustiantes en ambas series. Monterrey dejó vivir a los Tigres con un gol de André Pierre-Gignac en el primer tiempo, lo que generó tensión en el cuadro dirigido por Tano Ortiz, aunque no tardó mucho el cuadro de la Pandilla en retomar la tranquilidad comenzando el segundo tiempo con gol de Cortizo. Cruz Azul, rival de Monterrey, también sufrió un lapso de 10 minutos en el segundo tiempo, en donde los Pumas amenazaron con otra épica remontada. El Memote fue héroe y villano en Pumas, primero con un golazo de cabeza y luego fallando el 2-0 en un mano a mano ante el portero. Y si creíamos que Chicharito se llevaba el oso de la semana facilito, apareció Antuna para competirle, fallando casi en la meta de la portería.

Los cuatro equipos clasificados tienen argumentos para poder levantar el título de campeón, siendo el club América el favorito, y las Chivas el caballo negro. Pero el ambientazo en el Estadio Azul, con una afición metida al 100 con su equipo, cantando a todo pulmón uno de los éxitos de Julieta Venegas y que se ha transformado en el himno del equipo, le da ese impulso anímico al equipo, por lo que no hay que descartar que el Cruz Azul pueda dar la sorpresa y pueda levantar la copa, lo que haría todavía más lindo el homenaje realizado al buen Paco Villa el domingo en el Estadio Azul, recinto en el que Cruz Azul nunca ha levantado un título de liga.