Gómez Morin, Baillères y el ITAM

El día de mañana tendrá lugar un evento significativo, no sólo para la comunidad del ITAM.

Está relacionado con la historia política y económica de México cuando se empezaba a transformar en distintos ámbitos, tras la Revolución. Se trata de la celebración del traspaso de dos tesoros documentales de la mayor relevancia: el acervo documental y la biblioteca del Centro Cultural Manuel Gómez Morin, ahora como patrimonio del ITAM.

El evento se cruza con varias fechas y acontecimientos significativos. Debió celebrarse el año pasado, en ocasión de los 75 años del ITAM, pero la pandemia no lo permitió. Hoy estamos en condiciones de reponer algunas de las conmemoraciones pospuestas, que ahora coinciden con el 125º aniversario del nacimiento de Manuel Gómez Morín (el pasado 27 de febrero), con el duelo, que todavía nos conmueve, por el reciente fallecimiento de Alberto Baillères —entusiasta impulsor de que el archivo y biblioteca Gómez Morín formaran parte del patrimonio institucional— y con la toma venturosa de estafeta de Alejandro Baillères Gual, como presidente de la Junta de Gobierno del ITAM.

El evento, que será encabezado por el Rector Arturo Fernández, resalta la relevancia de dos personajes centrales en la historia del país en el periodo post cardenista: Manuel Gómez Morin y Raúl Baillères Chávez. Sería injusto e insuficiente, en un espacio tan reducido como éste, pretender dimensionar las enormes contribuciones de ambos personajes, por lo que sólo cabe un breve recuento de las principales.

En el ámbito político, no se puede entender la lucha por las libertades en el país —particularmente la educativa y la religiosa— sin la visión de Manuel Gómez Morin, uno de los llamados “siete sabios de México” (generación de 1915), rector de la UNAM y artífice del Banco de México, entre muchas otras contribuciones, aunque su impronta principal en el ámbito político fue la idea y fundación del Partido Acción Nacional, como instrumento para la transformación de la vida pública en el país y en oposición al régimen hegemónico post revolucionario. La lucha por la justicia, la libertad y la democracia, encabezada por Gómez Morin, fue crucial durante las primeras décadas del autoritarismo priista.

Por su parte, las grandes aportaciones al país de Raúl Baillères, en el ámbito empresarial y educativo, son innegables. Perteneció a esa generación de empresarios que se echaron al hombro las dignísimas tareas de contribuir a crear y consolidar un sistema de salud y educación, así como generar la infraestructura que el país requería para transformarse en una nación moderna, tras el largo periodo de destrucción revolucionaria. Se comprometió fuertemente, con visión y liderazgo, con el desarrollo de la industria mexicana. Y, en su afán por aportar a la educación del país, de todas sus obras, la creación del entonces Instituto Tecnológico de México (hoy ITAM),- estaría destinada a ser determinante en la vida económica, política y social del país.

Personajes comprometidos con el desarrollo del país; constructores e ideólogos de instituciones; protagonistas de una generación comprometida con el desarrollo nacional en distintos ámbitos; promotores de las libertades; convencidos del poder de la educación, la ciencia y la técnica; líderes con enorme talento, arrojo y visión, que compartían, además de un enorme amor por México, una amistosa relación de confianza. Hoy, el ITAM se congratula por preservar parte de su valiosísimo legado, en beneficio de las generaciones presentes y futuras de estudiantes e investigadores interesados en analizar, documentar y comprender los avatares del siglo XX mexicano.