En cuestión de segundos, Cristiano pasó de la alegría por haber anotado un gol agónico al descontento por lo que consideró un error del silbante, en una fase de la eliminatoria en que no está disponible el videoarbitraje (VAR).
El astro se quedó cerca de conseguir el tanto en los descuentos, pero el zaguero serbio Stefan Mitrovic se deslizó para alejar el balón cuando estaba a punto de cruzar la línea de gol.
Cristiano consideró que la pelota había entado. El árbitro holandés Danny Makkelie opinó lo contrario y castigó las quejas del delantero con un cartón amarillo.
Para una Serbia que jugaba con 10 hombres, el final coronó un encuentro en que sus integrantes lucharon incansablemente para reponerse de un déficit de dos tantos.
Portugal sigue en la cima
Serbia y Portugal comparten la cima del Grupo A con cuatro puntos. Luxemburgo viene a continuación con tres, luego de dar la campanada con un 1-0 sobre Irlanda en Dublín. La selección irlandesa y la de Azerbaiyán marchan en el fondo, sin sumar.