La Premier League por fin regresó luego de 100 días de inactividad obligada por la pandemia del COVID-19.
La emotividad y las manifestaciones contra el racismo no faltaron. Desde el primer partido entre el Aston Villa y el Sheffield United los jugadores se organizaron para arrodillarse en el terreno de juego como muestra de inconformidad contra los actos de discriminación.
Además, todos los jugadores portaron en sus dorsales la frase "Black Lives Matter" en el lugar donde normalmente irían sus nombres.
Por otro lado, antes del arranque del partido se guardó un minuto de silencio en honor a todas las personas que han perdido la vida a causa del COVID-19.
rmp