El exconsejero presidente del extinto Instituto Federal Electoral (IFE), Luis Carlos Ugalde, señaló que las instituciones electorales han sufrido un proceso de hiperregulación a partir de 2017, que ha elevado los costos de la democracia.
“Las autoridades electorales son acusadas de costar muy caro, pero en parte de ese creciente presupuesto que se requiere, es para administrar la sobrerregulación y creo que este ha sido uno de los aspectos negativos, desde el punto de vista conceptual, de las últimas reformas electorales”, aseveró.
Durante la presentación del libro “Elecciones, justicia y democracia en México. Fortalezas y Debilidades del sistema electoral” de su autoría, el director de Integralia criticó la tendencia del creacionismo de pensar que la democracia nació en 2018 y de que todo lo que ocurrió antes no sirve y que por lo tanto hay que desmontarlo.
“Siento que estamos perdiendo el rumbo. Así como hubo un momento virtuoso, ascendente progresivo, de reformas electorales, entre 1977 y 1996 en donde se nota una ruta y una visión de largo plazo, a partir de 2007 empieza a haber resbalones; no es que no haya ocurrido nada bueno entre 2007 y 2013, en estas dos reformas, pero se ha perdido el rumbo y la visión de hacia dónde llevar el sistema electoral”, explicó Luis Carlos Ugalde.
En opinión del especialista, a partir de la elección de 2006, los políticos reaccionaron para tratar de resolver problemas coyunturales sin una visión de largo plazo hacia dónde llevar al sistema electoral. “Sobre todo, simplemente para darle gusto a algunos actores, uno de ellos, por cierto, el actual Presidente de la República”.
Indicó que la presunción de un presunto fraude, que no se ha probado todavía, provocó que se empezaran a introducir algunos cambios positivos, como dar certeza al conteo de los votos, pero también se empezaron a establecer restricciones como la restricción a la libertad de expresión de los actores políticos.
En ese sentido, ante la posibilidad de una eventual discusión de una reforma electoral recomendó la lectura de los dos volúmenes de los que consta la obra, que pueden servir de referente para que los legisladores pongan el balance de lo que funciona.
“También para poner en perspectiva esta tendencia del creacionismo de pensar que la democracia nació en 2018 y de que todo lo que ocurrió antes no sirve y que por lo tanto hay que desmontarlo”, expresó el autor de la obra publicada por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
ANR