La madre de Salvador Ramos, el tirador que mató a 19 niños y dos maestras en una primaria de Uvalde, Texas, habló tras la masacre y dijo que su hijo “no era un monstruo”.
La mujer identificada como Adriana Reyes sostuvo en entrevista con la cadena ABC que podía ser agresivo, porque se enojaba fácilmente, hecho que admitió la ponía intranquila.
Y específico que su conducta cambiaba mucho cuando lo hacían enojar, pero no explicó si notó indicios de que cometería este ataque, mismo que su abuela intentó evitar sin éxito, pues el joven de 18 años asesino a 21 personas en un salón de la Escuela Primaria Robb.
La mujer, que según amigos de Ramos consumía drogas, se sumó a la vigilia en honor de las víctimas y externó sus condolencias por la tragedia causada por su hijo.
En tanto, la pareja de Reyes dijo a Telemundo que nunca advirtió signos sobre esta violencia. Y añadió que, aunque el joven discutía muy seguido con su madre, nunca tuvo problemas con él.
Por separado, el abuelo de Salvador, Rolando Reyes, ofreció perdón a las familias afectadas, pues reconoció que algunos de sus amigos perdieron a sus nietos en esa masacre.
Y dijo que si él hubiera estado en casa como la abuela probablemente también lo habría atacado, pues se sabe que la mujer recibió al menos nueve disparos y continua hospitalizada en San Antonio.
lemm.