Debido a la reciente jornada de protestas y enfrentamientos entre manifestantes y la Policía Nacional, a partir de este sábado y "hasta nuevo aviso" se restringió el acceso a las ruinas de Machu Picchu, joya turística de Perú.
Así lo anunció el Ministerio de Cultura ante "la actual coyuntura social" que atraviesa la nación andina, pues los choques en contra del gobierno de la presidenta Dina Boluarte y para demandar nuevas elecciones han dejado un total de 45 personas fallecidas.
Además, se tomó la decisión para "salvaguardar la seguridad" del pueblo peruano y de turistas nacionales y extranjeros, quienes podrán utilizar sus boletos hasta que concluyan las movilizaciones o solicitar la devolución de su dinero.
El cierre sucede luego de que, según medios locales, el servicio ferroviario desde Cusco hasta Machu Picchu se vio afectado por presuntos manifestantes, quienes dañaron las estructuras de los rieles.
De acuerdo con el medio La República, al momento hay 417 personas varadas en el distrito de Machu Picchu, de las que más de 300 son extranjeras.
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