La Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) aseguró que los mexicanos han dicho adiós a la compra de productos de primera calidad y ante el constante incremento de precios han optado por alimentos de tercera y hasta cuarta calidad, con sus nutrientes disminuidos y con sabor distorsionado.
En cárnicos, los consumidores están comprando vísceras, alitas y pescuezos, quedando atrás las pechugas, piernas y muslos, mientras que el huevo, cebolla, chile y aguacate, entre otros, cada vez se compran más por pieza y no por kilo.
“Esta radiografía del abaratamiento del consumo describe la emergencia económica que se atraviesa por su debilitado poder adquisitivo y lo encarecido de los alimentos que en muchos casos obliga a abstenerse de comprarlos”, expuso el organismo en un comunicado.
Indicó que a un mes de anunciarse el Paquete Contra la Inflación y Carestía (Pacic), cuyo objetivo pretendía anclar precios máximos en el mercado de 24 productos esenciales de la canasta básica, “no ha logrado contener el alza de precios”.
Por tal razón, la ANPEC señaló que las amas de casa responsables de realizar las compras de alimentos en el hogar “continúan haciendo verdaderos malabares, cuasi acrobacias, para conseguirlo, ya que el impacto del Pacic a la fecha es prácticamente nulo”.
Entre los recursos que las amas de casa se ven obligadas a tomar, buscando hacer rendir su anémico poder adquisitivo ante la escalada inflacionaria, figuran el que el bistec de res empieza a ser sustituido por carne de caballo, ya que es más barata.
Aunado a que, según la ANPEC, es de alto riesgo sanitario, ya que los rastros no están regulados adecuadamente para la matanza de estos animales.
“Estos consumos emergentes son atribuibles a aquellos que los logran hacer, puesto que amplios segmentos de la población, por insolvencia, simplemente han suprimido de su dieta a la proteína animal”, comentó el presidente de la ANPEC, Cuauhtémoc Rivera.
lemm.