Razones Financieras
Por Ivonne MacGregor Niño de Rivera
Los inversionistas, las instituciones financieras, gobiernos y empresas de cualquier tamaño deben determinar la tolerancia al riesgo para poder planear y poder crecer. No tomar riesgos va a significar no progresar, así como tomar riesgos inadecuados puede significar crisis en el amplio sentido de la palabra y la desaparición de los negocios.
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Pero, ¿Cuál es el punto óptimo y cómo determinarlo?, ¿cuánto riesgo deben asumir las empresas para satisfacer a los accionistas que demandan cada vez más la evidencia de límites claros y directrices que informen la naturaleza y la cantidad de riesgo que una organización puede tolerar?.
Esto es exactamente la tolerancia al riesgo, es decir, la resistencia de una empresa a inversiones o proyectos que puedan salir mal.
La tolerancia al riesgo mide la volatilidad (riesgo) que la empresa está dispuesta a asumir a cambio de esperar un mayor rendimiento. Una empresa con tolerancia al riesgo va a buscar proyectos o inversiones con mayor potencial de rendimiento aunque exista mayor probabilidad de pérdida de capital.
Para su análisis se deben tomar en cuenta tres factores estratégicos que son interdependientes entre sí:
1) Asignar los recursos (los gastos) de la empresa para identificar y administrar los riesgos que puedan exponer el logro satisfactorio de los objetivos, ésta asignación debe ser una práctica para empresas que operan, mantienen y reemplazan un portafolio de activos industriales o civiles.
2) Medir la capacidad financiera para tolerar el riesgo de acuerdo al horizonte de tiempo, liquidez, riqueza e ingresos.
3) Medir cuanto es el riesgo óptimo que la empresa debe asumir, esto es, construir un portafolio de riesgo eficiente, igual que en la teoría moderna de portafolios, los planes estratégicos conforman un portafolio de activos, proyectos, inversiones y obligaciones.
La teoría central es que la empresa debe de minimizar el riesgo y al mismo tiempo maximizar el rendimiento, plantear una combinación perfecta de activos y pasivos que sea el punto donde agregar una unidad de riesgo proveerá rendimientos marginales, este punto se encuentra en la curva de frontera eficiente, la que se debe determinar por medio de un análisis de optimización con varias combinaciones de asignación de recursos a los proyectos de la planeación estratégica con modelos de proyecciones del desempeño en resultados de diversos escenarios tomando en cuenta la correlación entre los activos y obligaciones del portafolio y así lograr la diversificación óptima.
En conclusión, cuando se realiza la planeación estratégica de largo plazo, la combinación de activos, proyectos, pasivos y obligaciones debe considerar estos 3 factores, entender la diferencia entre éstos, ayudará a las empresas a desarrollar un plan estratégico con los riesgos más adecuados a su circunstancia y tener la certeza de lograr sus objetivos.
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