Arturo Damm Arnal

Buen inicio

PESOS Y CONTRAPESOS

Arturo Damm Arnal*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
Arturo Damm Arnal
*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
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Los últimos cuatro Pesos y Contrapesos los dediqué (considerando las predicciones de los economistas del sector privado, encuestados por el Banco de México en febrero, en materia de crecimiento/dinamismo e inflación/estabilidad para 2023 y 2024), a analizar como puede terminar este sexenio, en términos generales, en materia económica, pudiendo terminar con un crecimiento promedio anual del 0.52 por ciento (muy bajo) y con una inflación, también en promedio anual, del 5.09 por ciento (muy elevada). Lo anterior considerando los resultados generales de la economía para todo el sexenio de la 4T.

Dejemos las predicciones (lo que puede pasar), y volvamos a los datos observados (lo que ya pasó), en una de las variables más importantes de la economía, el crecimiento, que se mide por el comportamiento de la producción de bienes y servicios, que el INEGI reporta trimestralmente con el Producto Interno Bruto, PIB, y mensualmente con el Indicador Global de la Actividad Económica, IGAE, producción relacionada con el empleo (para producir alguien debe trabajar), y el ingreso (a quien trabaja se le paga), empleos e ingresos relacionados en buena medida con el bienestar. Ya tenemos los datos observados del IGAE para enero y son buenos.

En términos mensuales, comparando cada mes con el mes anterior, en enero el IGAE creció 0.6 por ciento. Un año antes, enero de 2022, creció 0.1. Un mes antes, diciembre de 2022, creció 0.4. El crecimiento promedio mensual del IGAE en 2022 fue 0.25 por ciento, y el del trimestre anterior a enero de 2023, de octubre a diciembre de 2022, fue 0.00. Por donde se le vea, buen resultado, en términos mensuales, el de enero.

En términos anuales, comparando cada mes con el mismo mes del año anterior, en enero el IGAE creció 3.6 por ciento. Un año antes, enero de 2022, creció 1.7. Un mes antes, diciembre de 2022, creció 3.1. El crecimiento promedio mensual del IGAE en 2022 fue 2.95 por ciento, y el del trimestre anterior a enero de 2023, de octubre a diciembre de 2022, fue 3.83. Quitando la comparación con el trimestre anterior, los resultados de enero fueron mejores.

En términos mensuales, para enero de los primeros cuatro años de la 4T, del 2019 al 2022, el crecimiento promedio del IGAE fue 0.4. En enero pasado fue 0.6, dos décimas más de punto porcentual, que equivalen al 50.00 por ciento.

En términos anuales, de 2019 a 2022, para enero de los primeros cuatro años del actual sexenio, el crecimiento promedio del IGAE fue menos 0.38 por ciento. En enero pasado fue 3.60, 3.98 puntos porcentuales más, equivalentes al 1,047.40 por ciento.

En materia de IGAE enero pasado fue, por mucho, el mejor enero de los cinco años ya transcurridos de la 4T. ¿Qué se estima para febrero? (Mientras no se tienen los datos observados para el pasado éste se estima y por no poder tener datos observados para el futuro éste se predice).

Según el Indicador Oportuno de la Actividad Económica, IOAE, que estima el crecimiento del IGAE, en febrero éste creció, en términos mensuales, 0.3 por ciento, la mitad que enero (0.6) y, en términos anuales, el crecimiento fue del 3.5 por ciento, una décima de punto porcentual menor que el de enero (3.6). Las cifras observadas para febrero las dará a conocer el INEGI el 25 de abril.

Por lo pronto, buen inicio de año en materia de crecimiento.